La familia alemana formada por Richard Schmitz, de 51 años; Beate Josefine Werner, de 41 años, y sus hijas Alexandra y Bianca, de 6 y 4 años respectivamente, fue brutalmente asesinada durante la madrugada del 23 al 24 de agosto de 1989 en el chalet Can Barda de la urbanización ibicenca de Benimussa. Los cadáveres de las cuatro víctimas fueron descubiertos tres días más tarde enterrados bajo una capa de hormigón, en un desnivel de una obra en construcción que se estaba llevando a cabo a escasos metros del chalet que ocupaban. Un fuerte hedor y un enjambre de moscas alertó del lugar donde habían sido enterrados. Al abrir la fosa, se descubrió el espeluznante crimen. Las víctimas fueron torturadas y estranguladas con cables e hilos de alambre.
El escalofriante crimen de Benimussa
Benimussa24/08/89 0:00
También en Sucesos
- Un edificio de propietarios en Palma acumula una deuda de 6.000 euros por culpa de un local okupado
- Detenido por poner un candado en un solar de la calle Manacor para evitar que entraran okupas
- Cortes y restricciones de tráfico por la celebración de la Mallorca 312
- Una masa de aire frío bajará las temperaturas por debajo de lo normal en Mallorca
- Los propietarios de viviendas en rústico que quieran legalizarlas deberán pagar una multa