TW
0
V. M. L. Ocho de los miembros de la banda detenida por la Guardia Civil en la 'operación Karakorum' pasaron ayer a disposición judicial. De ellos, cuatro ingresaron en prisión provisional por orden del juez de guardia. El resto de los detenidos quedaron en libertad con cargos después de ser interrogados a lo largo de la tarde de ayer. Otros dos de los detenidos el viernes no llegaron a pasar al juzgado.

La Guardia Civil detuvo a diez personas el pasado viernes y llevó a cabo nueve registros domiciliarios en una operación contra la delincuencia organizada. El grupo desarticulado se dedicaba a perpetrar robos en cajas fuertes en Mallorca. En concreto, utilizaban distintas herramientas para forzar cajas de seguridad en establecimientos hoteleros para robar los objetos de valor guardados en ellos. Para ello accedían a las habitaciones a través de los balcones o forzando las puertas con dispositivos electrónicos. El grupo fue investigado durante varios meses por la Guardia Civil. En los registros, la Benemérita intervino diversos objetos procedentes de los robos, denunciados en una gran cantidad de establecimientos.

Además de los robos, la organización se dedicaba al tráfico de drogas a pequeña escala. La banda estaba compuesta por hombres de distintas nacionalidades; aunque estaba liderada por argelinos también formaban parte de ella marroquíes y españoles.