Dos empleados de la funeraria introducen el cuerpo de la víctima en el furgón. | Vasil Vasilev

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El Cuerpo Nacional de Policía investiga el homicidio de un hombre de 67 años de edad que fue hallado maniatado y con un fuerte golpe en su piso de Palma. Los agentes mantienen abiertas varias líneas de investigación y no descartan ninguna hipótesis sobre el móvil del crimen.

El fallecido, Manuel Sánchez Núñez, era soltero y residía solo en un primer piso del número 169 de la calle San Rafael de Palma, cerca de la calle Aragón. Ayer por la mañana, a las ocho y media, había quedado con su hermano José en es Rafal para ir a pasear por el rastro. Después, Manuel, José, su mujer, Dolores, y varios familiares más, tenían previsto realizar una comida familiar en una casa en el campo propiedad de Manuel, en unos terrenos cercanos a Son Reus.

A las diez de la mañana José regresó a su domicilio y le dijo a su esposa Dolores que Manuel no había aparecido. Ambos pensaron que podía haberse despistado por el cambio de hora y trataron de contactar con él a través del móvil, pero el teléfono estaba apagado.

Entonces, José y Dolores fueron a la casa del campo para ver si Manuel, que había cumplido los 67 años el pasado mes de enero, se había ido allí directamente. Sin embargo, al llegar a la vivienda encontraron todo cerrado.

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Acto seguido, Dolores llamó a su cuñada Encarna y le pidió si sabía algo de su hermano Manuel. Ella respondió que había quedado con él para que la pasase a recoger en coche a las once de la mañana, y así irían juntos al campo, pero no había ido a buscarla y tampoco sabía nada de él. Por ello, Encarna y un hijo suyo fueron hasta el primer piso de la calle San Rafael para ver si le había ocurrido algo a Manuel. Allí encontraron el cadáver maniatado, con distintos golpes por la cara y un fuerte golpe en la cabeza, por lo que dieron aviso a la policía. Después, los familiares se fueron avisando entre ellos y se desplazaron hasta la calle San Rafael. Manuel tenía ocho hermanos. Uno de ellos falleció hace un tiempo pero entre los otros había muy buena relación y se veían o estaban en contacto con bastante frecuencia.

Inspección

El CNP se hizo cargo de la investigación para aclarar las causas. El interior de la casa estaba desordenado, pero la puerta no había sido forzada.

Una de las hipótesis con las que se trabaja es que el criminal entrara a robar en la vivienda, pero el hecho de que la puerta de acceso no estuviese forzada plantea dudas, ya que o bien Manuel tuvo que abrir a su agresor al conocerlo, porque había una puerta de seguridad; o bien fue abordado en la calle cuando bajó a pasear al perro por la noche y le obligaron a subir a su piso y a abrir. El autor o autores del crimen tampoco se llevaron algunos objetos de valor que había en la vivienda, aunque se desconoce de momento si Manuel guardaba dinero en casa.

Por ello se siguen otras líneas de investigación. Durante toda la tarde se realizó una exhaustiva inspección en el piso y se recogieron posibles pruebas. Los investigadores también prevén rastrear los movimientos bancarios que el fallecido había realizado en las últimas fechas para averiguar si podía ser víctima de algún tipo de extorsión.