Agentes de la Policía Local de Andratx realizan mediciones en el lugar donde fue hallada la víctima.

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La Guardia Civil busca más pruebas para esclarecer la muerte de María Coll Garí, la mujer de 75 años que fue hallada malherida frente a su vivienda de la calle Antonio Mulet de Andratx. La principal línea de investigación sobre la que se trabaja es en el atropello de la mujer, en la noche del martes, por parte de un conductor que después huyó. No obstante no se descartan otras hipótesis. Tanto la Policía Local de la localidad como la Guardia Civil llevan a cabo gestiones para aclarar el suceso.

Un italiano que conducía una furgoneta fue el que alertó al teléfono de emergencias 112 de que la mujer estaba tendida en el suelo ensangrentada. De inmediato se desplazaron hasta la calle Antonio Mulet efectivos de los equipos de emergencia y hallaron a la mujer herida. La víctima estaba muy grave y fue evacuada después a Son Espases, donde falleció sobre las tres de la madrugada.

Posteriormente la Guardia Civil identificó a este conductor, que tiene fijada su residencia en s'Arracó. Los agentes hicieron fotos a su furgoneta y se la confiscaron durante 24 horas, mientras se llevaban a cabo diversas diligencias.

Declaración

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Los agentes sospechan que este conductor pudo ser el causante del atropello de la mujer y, una vez que dio aviso al 112, abandonó el lugar. La cámara de seguridad de una entidad bancaria que hay a poca distancia fue una de las pruebas que se recogieron para implicar al sospechoso. El lugar donde ocurrió el atropello es una calle estrecha con poca iluminación y la víctima estaba frente a su domicilio.

No obstante el conductor niega tener relación con la muerte de María Coll, quien era muy conocida en Andratx. La noticia de su fallecimiento causó dolor en la zona y la tragedia es uno de los temas de conversación que se repiten estos días entre el vecindario.

El conductor sospechoso, además de negar su posible implicación en el atropello, se mostró molesto por el perjuicio que le habían causado cuando le confiscaron la furgoneta, porque no había podido ir a trabajar.

Ayer por la mañana el conductor prestó declaración en las dependencias de la Guardia Civil pero no se procedió a su detención. De momento, tanto los agentes de este Cuerpo como los de la Policía Local de Andratx tratan de atar los cabos sueltos para resolver el suceso.