El turno de guardia de los Bombers de Palma en el parque central. | Jaume Morey

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Decenas de efectivos de los equipos de emergencias velaron por la seguridad de los demás durante la pasada Nochevieja. Desde el servicio de emergencias del 112, indicaron ayer que se recibieron 769 llamadas correspondientes a 213 incidentes durante la noche de fin de año en Balears. Los sucesos más graves fueron el apuñalamiento mortal de Eivissa y el atropello de la vía de cintura de Palma.

A excepción de estos dos casos, la mayoría de incidencias fueron las habituales en Nochevieja, tales como siete accidentes de tráfico sin víctimas o heridos de carácter leve, seis pelas, once intoxicaciones etílicas y otra por consumo de drogas, cuatro quejas por molestias de ruidos procedentes de domicilios o locales, dos denuncias por actos de vandalismo y cinco incendios de contenedores en la vía pública, causados en su mayoría por los petardos y cohetes lanzados tras las campanadas.