El arresto fue practicado por agentes de la Policía Local de Palma. | Alejandro Sepúlveda

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El ‘clásico’ disputado entre el Real Madrid y el FC.Barcelona fue el detonante para que Simeón R.M., paraguayo de 61 años de edad provocara un grave altercado en un domicilio de la calle Miquel Santandreu de Palma.

Sobre las 23 horas, el hombre regresó a su domicilio tras haber estado viendo el partido de fútbol. Nada más llegar, fruto del alto grado de embriaguez que llevaba, comenzó a gritar manteniendo una actitud muy violenta que provocó que sus dos hijas, ambas menores de edad, se encerraran en su cuarto visiblemente atemorizadas.

En ese momento, según el relato policial de los hechos, llegó su hija mayor en compañía de su nieta de corta edad. Al comprobar que su padre se encontraba bajo los efectos del alcohol le pidió que le entregara a las hermanas. El progenitor se negó tajantemente. Se trata de un matrimonio separado que disfruta de la custodia compartida de las menores.

A partir de ese momento se vivieron unos instantes de nerviosismo y tensión. La madre de las niñas llegó al domicilio, pero permaneció en la entrada del edificio. Las niñas no cesaban de gritar y pedir que querían irse con su madre y se optó por llamar a la Policía Local de Palma. A la llegada de los agentes las menores salieron del cuarto corriendo.

Los funcionarios trataron de tranquilizar a todas las partes, pero el varón no cesaba de gritar que tenía una orden judicial que le concedía la custodia. El hombre se abalanzó sobre los dos policías, los tiró al suelo y les agredió. Se procedió a su arresto y se le acusó de un delito de atentado contra agentes de la autoridad.