Una veintena de agentes de la Policía Nacional participaron en el desalojo del rancho de s’Aranjassa a principios de 2015. | Pere Bota

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El rancho La Paz de s’Aranjassa fue asaltado por el clan de Los Benabad. Un testigo protegido de la causa reconoció en su declaración que Marcos Benabad le amenazó y extorsionó para que cometiera actos delictivos.

En 2015, Marcos Benabad «me obligó a llevarme la arena geotextil del rancho La Paz, sito en s’Aranjassa de Palma, valorada entre 200.000 y 300.000 euros. Esta arena la extraje con una mini excavadora propiedad de Marcos y con un camión alquilado a mi nombre. Toda la arena extraída fue depositada en una finca cercana al rancho Veracruz, propiedad de un amigo de Marcos», señala el arrepentido en su declaración.

El asalto del rancho se produjo en septiembre de 2014 cuando la propietaria, de nacionalidad británica, se encontraba fuera de la Isla por cuestiones familiares. Los gitanos llegaron con una furgoneta, forzaron las cerraduras y se apoderaron de la propiedad.

Tras interponer la correspondiente denuncia, el juzgado dio la razón a la perjudicada y ordenó el lanzamiento a mediados de enero de 2015. Una veintena de agentes de la Policía Nacional estuvieron presentes en el desahucio, que se realizó sin incidentes. No obstante, en la finca había numerosos daños y también se halló una plantación de marihuana perteneciente a los ocupas.