Imagen del Puente de Arre, en Navarra, desde donde un hombre ha confesado a la Policía que ha tirado el cuerpo de su mujer tras estrangularla en el domicilio en el que ambos vivían. | VILLAR LOPEZ

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El grupo de rescate acuático de bomberos, en contacto con la Policía Nacional, está tratando de localizar en el río el cadáver de la vecina de Burlada cuya pareja ha confesado haberla estrangulado y arrojado al río Ulzama.

La consejera de Presidencia, Función Pública, Interior y Justicia del Gobierno de Navarra, María José Beaumont, ha explicado a los periodistas que, según la información que le ha trasladado el oficial de bomberos encargado del dispositivo, es imposible bucear en el fondo del río dada la fuerza y la turbidez del agua.

Sí que se puede bucear en superficie y en las márgenes del río por si el cuerpo de la mujer «hubiera quedado a lo mejor sujeto a la vegetación y fuera visible», ha detallado Beaumont, quien ha precisado que si el cadáver de la vecina de Burlada hubiera quedado sumergido «no flotaría hasta pasados cuatro, cinco o más días».

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Por todo esto, ha explicado que se está realizando un buceo superficial y que un helicóptero va a sobrevolar también «a los efectos de ver zonas a lo mejor de difícil accesibilidad personal». «En cuanto tengamos novedad la haremos saber», ha asegurado.

Beaumont, que este martes ha participado en la concentración convocada por los trabajadores del Departamento de Derechos Sociales, y compañeros de la víctima, ha indicado que el dispositivo de búsqueda comenzó este lunes, pero «por la fuerza con la que baja el agua tampoco se pudo hacer mucho y luego ya oscureció», por lo que «decidieron dejarlo para esta mañana».

«Pero esta mañana el problema es el de la turbidez, ha bajado el caudal pero con la turbidez del agua no se podía entrar, a parte de las temperaturas tan frías», ha expuesto.