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El lunes vuelve el ‘caso Cursach’. Después de un parón veraniego y por agenda, la Audiencia Provincial retoma las sesiones del macro juicio. A partir de esta semana y hasta el 22 de diciembre desfilarán por estrados 233 testigos. Con ellos arranca la fase decisiva del juicio en la que se verá qué acusación aguanta y cuál no. También será el momento más incierto y abierto a sorpresas.

Testigos impredecibles

Lo habitual es que un juicio sea algo poco dado a sustos. Todo el mundo ha declarado durante la instrucción y acusaciones y defensas tienen claro lo que se dijo entonces y qué se puede decir ahora. Esto, en el ‘caso Cursach’ no está nada claro. Nadie sabrá seguro lo que va a decir cada uno de los testigos hasta que lo haya dicho. Y hay perfiles para todos los gustos: desde el exconseller de Turisme, Carlos Delgado a ‘El Ico’. Entre el tiempo que media de los hechos objeto de acusación y las dudas entre la fidelidad de las transcripciones de las testificales puede pasar de todo. En la causa del TSJIB contra el ex juez Penalva y el exfiscal Subirán ya hubo varios testigos del macro juicio que se retractaron de lo que habían dicho en la instrucción. Otros han matizado en otros foros sus posturas.

Lo que queda

El juicio arrancó el 13 de junio. De entrada, la Fiscalía presentó un escrito en el que recortaba de forma drástica la acusación. El primer día fueron absueltos cuatro de los 17 acusados: la ex directora general de Turisme, Pilar Carbonell; el director de Tito’s Jaume Lladó; los funcionarios del Govern y de Palma Bernardí Seguí y Julián Garaú y dos empleados del Grupo Cursach, Antonio Bergas y Arturo Segade. La acusación de la Fiscalía sostiene que Cursach, a quien pide un año y medio de prisión ahora, presionó a tres locales de la competencia a través de policías locales de Palma. Tras las cuestiones previas quedaron en pie tres acusaciones particulares que solicitan penas mucho más alta y que centra los cargos en dos locales de Palma y uno de Magaluf. Este último está representado por la abogada Teresa Bueyes, que protagonizó varias de las primeras doce jornadas del juicio. Los cargos son más graves contra varios agentes de la Policía Local, los principales acusados ahora.

Los primeros testigos

La Fiscalía renunció a testigos a los que acusa de mentir como la madame. Con el cambio de calificación, los testigos clave del juicio ahora son otros. Este mismo lunes hay una declaración importante, la de la inspectora del Grupo de Blanqueo de la Policía Nacional. Esta agente, imputada junto a Penalva y Subirán en el TSJIB, tuvo un papel clave en las primeras fases de la investigación que afectaban a la Policía Local de Palma. En concreto fue quien participó en la redacción de los informes sobre la actuación de la Patrulla Verde en cada uno de los locales y concluyó que fueron irregulares. Esas conclusiones han sido negadas por los agentes acusados que defienden que sus actuaciones siempre estuvieron precedidas de multitud de denuncias. Antes que ésta le tocará a uno de los testigos protegidos que mantienen esta condición: un exempleado de Cursach que afirmó que nunca recibía inspecciones ni de la policía ni de inspectores de trabajo. El martes comparecerán tres agentes de la policía local. Serán decenas los que lo harán en todo el juicio.

Días clave

Entre el aluvión de testigos hay varias fechas que, ahora mismo, parecen trascendentales para el juicio. La próxima semana declaran dos de los policías locales que fueron claves durante la instrucción y que colaboraron con Penalva y Subirán. El 24 de octubre está citado el empresario Ángel Ávila, uno de los que sostiene que sufrió un acoso constante durante años por parte de Cursach que le llevó a cerrar sus locales. El 16 de noviembre será el turno de los empresarios de Magaluf que también acusan, una derivada del caso en la que la Fiscalía no mantiene cargos y que ha quedado muy diluida. El día 4 de noviembre está citado para declarar ‘El Ico’ también por el cierre de una discoteca que abrió en Gomila.

Defensas

A finales de noviembre comenzarán a declarar los testigos de las defensas. Los abogados han recortado en un centenar de personas la prueba que reclamaban inicialmente. Consideran que la marcha del juicio les va suficientemente bien como para hacerlo. Sobre todo han aligerado el número de denunciantes de ruidos e irregularidades en locales que tenían que comparecer. Mantienen a mandos de la Policía Local, a otros agentes y a antiguos investigados y testigos del caso, algunos de los cuales han afirmado más tarde que fueron coaccionados durante la instrucción. El último testigo citado es el exconcejal Carlos Veramendi, imputado durante meses que demostró su inocencia.

Meses de juicio

Las testificales terminarán el 22 de diciembre, con el sorteo de Navidad. Quedarán para 2023 peritos, documentos, conclusiones e informes. Sin embargo, en estos tres meses será cuando se vea si algo de lo que llegó a juicio aguanta. Se auguran sesiones explosivas.

El apunte

Renuncia de último momento al jefe de Blanqueo

El calendario de testificales, fijado hasta el 22 de diciembre se moverá sin duda según como marche la prueba. Incluso se han producido algunas renuncias. La letrada Teresa Bueyes, por ejemplo, ha pedido que no declare el jefe del Grupo de Blanqueo de la Policía Nacional, principal responsable de la investigación pero que está imputado en la causa en el Tribunal Superior de Justicia.