El exjuez Manuel Penalva ha sido condenado a nueve años y un día de prisión. | Alejandro Sepúlveda -

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Manuel Penalva se ha convertido en el segundo juez de la historia judicial española condenado a más tiempo de prisión: nueve años y un día. La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de les Illes Balears (TSJIB) no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo.

El primero fue Luis Pascual Estevill, exvocal del Consejo General del Poder Judicial, que fue sentenciado en 2005 a nueve años y cuatro meses de cárcel por exigir dinero a empresarios para que no los enviara a prisión. Ocho investigados se libraron de ser encarcelados tras sobornar al exjuez, que falleció en a los 89 años en septiembre de 2022.

El tribunal consideró probado que en dos de esas actuaciones el exmagistrado cobró 75 millones de pesetas (450.759 euros) que fueron ingresadas en una cuenta que había abierto en Suiza.
Estevill pasó de juez estrella a corrupto. Entró en la cárcel un año después de recibir la sentencia y tres años más tarde la Generalitat de Catalunya le concedió el tercer grado.

Penalva, la segunda pena de cárcel más alta de la historia judicial
El exjuez Luis Pascual Estevill fue condenado a nueve años de cárcel en 2005 por aceptar sobornos de empresarios.
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En 2021, el Tribunal Supremo confirmó la condena de seis años y medio de cárcel para el juez Salvador Alba por conspirar contra la jueza y actual delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rossell. El 18 de octubre de 2022, Alba ingresó en el centro penitenciario Las Palmas 1 para cumplir la pena por delitos de prevaricación judicial, cohecho y falsedad en documento público.

El último juez en pisar la cárcel ha sido Fernando Presencia, que fue condenado a dos años y diez meses de prisión por fabricar pruebas para inculpar a altos cargos y pedir donaciones para su fundación anticorrupción.

Impunidad

A finales del pasado junio, el juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ordenó el ingreso en prisión de Presencia por riesgo de fuga y reiteración delictiva. «El investigado sigue creyendo que es magistrado en activo (…) pese a las dos sentencias condenatorias». Más aún, señala Gadea, «se cobija en su condición de magistrado para buscar una impunidad que no ostenta ni el jefe del Estado, y pretende eludir cualquier clase de responsabilidad».

Los exmagistrados Joaquín García Lavernia y Carlos Lorenzo Penalva cumplieron cinco y cuatro años de cárcel, respectivamente, por cohecho. Fueron los primeros jueces encarcelados en la historia judicial española.