La traición del nieto

Al cabo de unos minutos, a unos 50 metros del establecimiento, vio a otro individuo fumando un cigarro. Era más delgado que el anterior y medía cerca de 1,75 metros. Iba embutido en un chándal rojo Adidas con capucha y rayas laterales blancas.

El repartidor de periódicos continuó su ruta de reparto por una calle paralela hasta que regresó a la calle Magallanes y vio a los dos jóvenes corriendo en dirección a Andrea Doria. Al hombre no le gustó la forma en la que abandonaban el lugar, por lo que decidió acudir al taller en el que trabaja un conocido de un amigo. Una vez allí vio a un señor, de unos 80 años, que se encontraba en estado de shock.

El hombre explicó que le acababan de robar 7.000 euros que tenía guardados en la caja fuerte. Un joven con el rostro cubierto le abordó por detrás y le agarró por el cuello amenazándole con una llave inglesa:

–Señor, no se mueva usted. Deme la cartera y ábrame la caja fuerte.

El asaltante le obligó a que le entregara la cartera y el dinero de la caja de seguridad mientras que otro individuo le esperaba en las inmediaciones del local. Era su nieto, un joven rumano de 18 años que fue acogido por el hijo de la víctima y que había trabajado en el taller. El delincuente sabía que a finales de semana tienen dinero en metálico para ingresarlo en el banco y por eso acudió con su amigo el viernes pasado a primera hora.

Las cámaras de los establecimientos de la zona grabaron a los dos delincuentes huyendo juntos del lugar. El Grupo de Atracos de la Policía Nacional abrió una investigación tras recibir la denuncia del propietario del taller y detuvo días después a los dos sospechosos.

El nieto de la víctima fue arrestado sobre las 19.40 horas del pasado 30 de enero en el Parc de ses Estacions. La jueza de Instrucción 5, ayer en funciones de guardia, decretó el ingreso en prisión del nieto de acogida que traicionó a su abuelo.