TW
0

El Mallorca está a la espera de conocer cuánto le van a costar algunos de los chollos que encontró en el mercado su director deportivo, Nando Pons, hace un par de temporadas. El club balear, que en la última semana ha tenido que declarar en dos ocasiones ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) en Lausana, espera ahora a que éste se pronuncie en los contenciosos abiertos tras los fichajes de Keita y Trejo. En Son Moix son optimistas y aunque en el peor de los casos la SAD isleña tendría que desembolsar en torno a doce millones de dólares, se estima que el gasto final de ambas operaciones se quedará algo más de medio millón. No obstante, tanto un caso como otro afectan a futbolistas que llegaban a la Isla con la carta de libertad bajo el brazo y que al final, entre salarios y primas de fichajes suponen un nuevo dispendio para las arcas rojillas. Sobre todo, teniendo en cuenta el escaso protagonismos que han tenido los jugadores en el equipo.

Cifras desorbitadas
El ejemplo más sangrante es el de Alhassane Keita. El Mallorca reclutó al guineano del fútbol árabe aprovechando que acababa de consumir su relación contractual con el Al-Ittihad. Sin embargo, la entidad balear cerró su llegada después de abonar 1'8 millones de euros en concepto de prima de fichaje, una cantidad totalmente desproporcionada. La operación se abrochó tras la intervención del agente Iñaki Ibáñez, con el que Pons trabaja habitualmente, y el delantero se aseguró un contrato que a la entidad, sólo en ficha, le supone el pago de 3.285.000 euros (657.000 euros por cinco temporadas). A eso puede que haya que añadirle una multa del TAS, ya que el club no detectó que el africano había incurrido en una presunta duplicidad de contrato y corrió el riesgo de perderlo unos cuantos meses por sanción. Por si fuera poco, Keita ha representado un papel testimonial en el vestuario y su radio de acción se limita a la Copa del Rey, ya que desde su llegada sólo ha sido titular en tres partidos de Liga.

La jugada con Trejo tampoco ha salido bien. El argentino se puso la camiseta del Mallorca en enero de 2007 y su llegada a Palma supuso un litigio con Boca Juniors, que reclama ahora diez millones de dólares alegando que su salida se produjo cuando ya era profesional. Los baleares, que en este caso cuentan con el respaldo del abogado Vicente Montes, lo niegan y reconocen como un triunfo que el fallo del TAS, previsto para dentro de unos meses, les obligue a abonar cerca de medio millón de euros por los derechos de formación del punta. Al igual que Keita, el Chocota apenas ha contado para el equipo y este año juega a préstamo en el Elche de Segunda División.

Varela también aparece en esa nómina de costosas incorporaciones. El sevillano llegó libre en el verano de 2006, pero la prima de fichaje que abonó el Mallorca ascendió a 900.000 euros. Firmó tres campañas y se le renovó hasta 2011 hace un año, coincidiendo con su peor momento de forma. Es el tercer mejor pagado del plantel actual (950.000 euros por año) y esta temporada apenas ha jugado.