Imagen de la tribuna de sol el pasado domingo. Ante el Numancia se espera una entrada similar o mayor. | M. À. Cañellas

TW
10

El domingo a las 18:00 horas el Real Mallorca juega ante el Numancia uno de los partidos más importantes de su reciente historia. Un encuentro que se debe enmarcar en el capítulo de partidos vitales para subsistir. No es una final con trofeo, ni el rival es un grande de Primera, pero en el estadio de Camí des Reis la cita es de una trascendencia tal que requiere de un ambiente especial.

Por este motivo el club pone a disposición una semana más 2 entradas por socio a recoger en el estadio desde este jueves jueves y hasta el mismo domingo, sábado incluido. El club sigue por lo tanto con una iniciativa que ha teñido de color rojo las gradas de Son Moix hasta el punto de tener que abrir el fondo sur. Ante el Elche acudieron al encuentro 12.479 espectadores y ante el Almería 12.940. Dos entradas que han dado mucho colorido al campo, pero sobre todo, han permitido recuperar la vistosidad en el estadio y que el equipo se sienta arropado en todo momento.

Sergi Barjuan se mostró agradecido por el apoyo recibido por la afición y sobre todo por la comprensión que tuvo cuando el equipo en algún momento se vio obligado a retrasar balones atrás. Ahora, con la salvación a dos puntos a falta de tres jornadas, el partido contra el Numancia tiene que ganarse sí o sí. A partir de ahí el partido ante el equipo soriano también se va a jugar en la grada y en esta nueva jornada el objetivo es superar la barrera de los 13.000 aficionados.

Deportivamente el equipo está ahora en una dinámica positiva, más allá de la laguna ante el Valladolid. Las victorias contra Sevilla, Elche y Almería han permitido recortar la distancia con el Alcorcón y es momento ahora de dar un paso más y luchar para salir del pozo.