Augusto Fernández traza una de las curvas del circuito de Motegi.

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El francés Fabio Quartararo (Speed Up), que a la postre resultó descalificado por no cumplir con la presión mínima en el neumático trasero de su moto, había sabido frenar con eficacia a un «calculador» Francesco 'Pecco' Bagnaia (Kalex), quien pensando más en el título, se conformó con la segunda posición en el Gran Premio de Japón de Moto2. Una carrera en la que el mallorquín Augusto Fernández (Kalex) logró su mejor resultado en el Mundial, con una sexta posición final, mientras que Joan Mir fue undécimo.

Apenas en un par de ocasiones en las dos últimas vuelta intentó Bagnaia superar a Quartararo, que supo cerrar muy bien todas las puertas a su rival camino de su segunda victoria de la temporada, tras la conseguida en Montmeló, pero tras el triunfo los tres primeros deben pasar un control técnico por parte de los comisarios de competición y en el mismo se detectó una presión más baja de la permitida en el neumático trasero de la Speed Up del francés, lo que era motivo inmediato de descalificación.

En la carrera, no defraudó en la salida Bagnaia quien a pesar del intento del francés Fabio Quartararo (Speed Up) de entrar primero en la curva de final de recta fue el italiano quien logró su objetivo, con el español Xavier Vierge (Kalex), tercero, e Iker Lecuona (KTM), que había logrado esa posición en la formación de salida, con problemas al pisar un arcén y perder ligeramente el control de su moto, lo que le hizo pasar séptimo en el primer paso por meta.

Alex Márquez (Estrella Galicia 0'0 Kalex) recuperó una posición en esa primera vuelta pues salió sexto y pasó por meta quinto, aunque perdiendo terreno con los pilotos que marchaban por delante.

Desde el principio «Pecco» Bagnaia imprimió un fuerte ritmo a la carrera y sólo Quartararo consiguió pegarse al rebufo de su moto, con el italiano Lorenzo Baldasarri (Kalex) y Xavier Vierge un poco más atrás y ya tras ellos el resto del grupo de cabeza, en el que estaban el portugués Miguel Oliveira (KTM), Alex Márquez o Joan Mir (Estrella Galicia 0'0 Kalex), entre otros.

Una vuelta más tarde, en la tercera, Fabio Quartararo intentó por primera vez liderar la carrera y, de hecho, en el primer parcial ya había conseguido casi cuatro décimas de segundo de ventaja sobre Bagnaia, que mantuvo en el segundo y tercero para completar la vuelta con esa diferencia.

Márquez tuvo su particular pelea con los pilotos oficiales de KTM, Miguel Oliveira y el surafricano Brad Binder, que por momentos le «emparedaron» entre ambos, hasta que en la quinta vuelta el africano le superó mientras por delante Fabio Quartararo tiraba con fuerza para intentar abrir un hueco y lograr su segunda victoria de la temporada en la categoría, tras la de Cataluña.

Con Quartararo, la carrera se estiró por delante y sólo Bagnaia y Baldasarri parecían estar en disposición de hacerle frente, mientras que a partir de Vierge -cuarto-, todos iban cediendo terreno al trío de cabeza, en particular Alex Márquez, que ya estaba en la novena plaza, superado por su compañero de Estrella Galicia 0'0, Joan Mir.

Quartararo imprimió un fuerte ritmo que le permitió distanciarse de todos sus rivales salvo de Bagnaia, quien respondió con una vuelta rápida a la que anteriormente había protagonizado el francés y pasado el ecuador de la carrera ambos se habían distanciado de todos sus rivales, pues Lorenzo Baldasarri ya era cómodo en la tercera plaza con una desventaja de dos segundos y, tras él, Xavier Vierge comandaba al grupo perseguidor a tres segundos y medio del italiano, ya muy lejos de cualquier posibilidad de podio.

Jorge Navarro (Kalex), que era decimotercero en esa misma vuelta, cometió un error en la curva tres que le hizo rodar por los suelos y con ello abandonar renqueante la pista ayudado por las asistencias del trazado nipón.

Las vueltas finales fueron un duelo mano a mano entre Quartararo y Bagnaia por la victoria, con el italiano controlando en todo momento a su rival, que intentó cerrar todos los huecos para obtener su segundo triunfo con la Speed Up mientras el líder del mundial buscaba el sitio propició para sorprenderlo.

Bagnaia buscó hasta el último metro forzar la equivocación de su rival, que no se produjo, pero sin forzar en lo más mínimo la situación para evitar un error que le impidiese incrementar su ventaja en el campeonato y sabedor de que el portugués Miguel Oliveira, su único rival por el título rodaba mucho más atrás y al final acabó cuarto, a la postre se encontró con la victoria por el comportamiento antideportivo del equipo del francés.

Alex Márquez fue el primer español de la categoría en la quinta posición, con Augusto Fernández (Kalex), sexto, por delante de Xavier Vierge (Kalex) e Iker Lecuona (KTM), y con Joan Mir en una más discreta undécima posición.