El español Rafa Nadal podría subir al número uno de la ATP si alcanza las semifinales en Montreal. | Reuters

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Rafael Nadal vuelve a mirar a lo más alto de la cumbre. En su segunda juventud tenística, de nuevo el mallorquín ha vuelto a exhibir un perfil enorme y que le permite afrontar a partir de esta semana el Masters 1.000 de Montreal con el objetivo de plantarse de nuevo en el número uno del tenis mundial. Para ello el tenista de Manacor deberá alcanzar las semifinales, un objetivo nunca fácil, pero sin duda al alcance del que es sin duda un Nadal que asusta sobre la pista.

El mallorquin disputará el sexto Masters 1.000 de la temporada, torneo que ha ganado en tres ocasiones (2005, 2008, 2013). Ahora vuelve a mirar lejos, pero lo hace sin ninguna obsesión, con una madurez incontestable y con la serenidad que da ser uno de los veteranos, pero a la vez, disfrutando de una forma física que está muy por encima de muchos de sus rivales.

El primer gran torneo después de Wimbledon se ha visto debilitado con la plaga de bajas que se han ido confirmando durante estos últimos días. Andy Murray, con una lesión en la cadera, Stan Wawrinka, con problemas en la rodilla izquierda, Novak Djokovic, cuyo codo le ha impedido seguir en la lucha y Marin Cilic con el aductor tocado, son cuatro de los top ten que no estarán sobre el cemento canadiense.

En el caso del suizo, como hizo el serbio hace unos días, anunció que ponía fin a la temporada al tener que pasar por el quirófano.

Primer rival

Nadal está exento de jugar la primera ronda y por lo tanto debutará ante el ganador del duelo que mida a Borna Coric y a un jugador procedente de la fase previa. En octavos de final, se mediría a John Isner o al argentino Juan Martín del Potro. Ya en unos posibles cuartos, podría tener como rival a David Goffin, Feliciano López o al canadiense Milos Raonic.

Si llegase a semifinales sería número uno de forma automática y podría medirse a Alexander Zverev; Nick Kyrgios; al también español, Pablo Carreño, o al octavo cabeza de serie, Jo-Wilfried Tsonga. Tras el extraordinario triunfo en París y el buen papel en Wimbledon, ahora se presenta esta gira americana con el número uno en el horizonte. Nadal alcanzó por primera en su carrera deportiva el número 1 de la ATP en agosto de 2008 y mantuvo esta privilegiada posición durante 46 semanas. Su segunda etapa al frente del ránking se inició en el mes de junio de 2010 y mantuvo dicha posicón por espacio de 56 semanas. En octubre de 2013 se encaramó de nuevo a lo más alto del trono mundial donde estuvo 39 semanas. Ahora, con un tenis otra vez de primerísimo nivel, puede darse de nuevo la opción de abordar la plaza que le coronaría de nuevo como el mejor del mundo.