Sergi Barjuan da instrucciones durante un partido. | M. À. Cañellas

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Son Moix presentará este sábado (16.00 horas) su mejor aspecto de la temporada. Los aficionados están respondiendo a las iniciativas puestas en marcha por el Real Mallorca y hasta este miércoles más de un millar de abonados habían pasado por las taquillas para retirar las tres entradas gratuitas a las que tienen derecho.

De esta forma, 3.600 localidades han sido recogidas ya por los socios para asistir a una cita trascendental. El grupo balear se juega mantener encendida la llama de la salvación. Recibe a un Elche en caída libre -tres derrotas consecutivas y solo tres puntos de los últimos quince- y al que se puede acercar a tan solo tres puntos si logra la victoria.

El récord, 10.828

El Estadi registrará su mejor entrada del campeonato y se espera que supere con creces los 10.828 aficionados que acudieron a presenciar el choque frente al Córdoba de hace dos semanas. Las previsiones más optimistas apuntan hasta los 13.000 o 14.000 espectadores, lo que supondría algo más de media entrada.

El Mallorca confía en el botín que logre en su centro de operaciones para mantener encendida la llama de la salvación hasta el final de temporada. La cita de este sábado es fundamental. Después del triunfo logrado el pasado domingo en el Pizjuán ante el Sevilla Atlético, el conjunto que dirige Sergi Barjuan persigue su segunda victoria consecutiva, una racha que no logra desde hace más de una temporada y media, precisamente en los dos primeros encuentros de Fernando Vázquez en el banquillo. Desde entonces, el Mallorca ha malgastado más de una docena de oportunidad para poder firmar ese pleno de dos triunfos. Pero ahora está obligado a sumar victorias para intentar acercarse a la zona de salvación.

Mientras la afición se moviliza de cara a un encuentro fundamental para el futuro de la entidad, el entrenador catalán prepara la cita en los entrenamientos. Se da por hecho que Sergi no experimentará en esta ocasión y que calcará frente al Elche el once que dibujó en el Pizjuán con Santamaría, Campabadal, Yuste, Pleguezuelo, Oriol; Vallejo y Culio en la sala de máquinas con Lago y Angeliño por las orillas y Moutinho y Brandon en ataque.