A ritmo de jazz se inició una fiesta que se esperaba concurrida,
pero que superó las expectativas. La formación Molly Duncan Quartet
amenizó una velada que se trasladó, después de los actos
institucionales celebrados en el interior de Es Baluard, a una gran
carpa colocada en la terraza de la muralla renacentista. Debido a
la gran audiencia concentrada en el Aljub para seguir el parlamento
de los patronos del museo y la actuación del mago Hausson, muchos
invitados decidieron seguir dichos actos desde las pantallas
instaladas en dicha carpa.
Numerosas fueron las caras conocidas que se vieron anoche en la
fiesta que celebraba el primer aniversario del Museu d'Art Modern i
Contemporani de Palma. Entre ellas, destacó la extensa presencia de
personalidades del arte local. Pep Llambías, Mariano Mayol, Joan
Bennàssar, Cristina Escape, Erwin Bechtold y su esposa Cristina,
Antonio Hidalgo, Ben Jakober, Yannick Vu, Jaume Mir, Amelia García,
Guido Dettoni, Eugenio López, Menéndez Rojas, Miquela Vidal y
Horacio Sapere fueron algunos.
Este último celebró la exposición de Joan Brossa «como una
estrategia de calidad que da forma al verdadero camino para
integrar definitivamente Es Baluard en el ámbito cultural de
Balears». También se encontraba entre los asistentes Rafa Forteza,
que valoró «positivamente» el primer año de este museo y comentó
que «más que la celebración de una año debería ser la celebración
de su presencia en la ciudad, que ha venido a revitalizar este
balcón a la bahía y que ofrece una realidad estupenda para un
futuro en continua trasformación». Pep Guerrero, que también acudió
la cita, destacó las exposiciones temporales que durante este año
han tenido cabida en Es Baluard -leáse las instalaciones de Rebecca
Horn y Fabrizzio Plessi, o la actual de Joan Brossa-. El pintor
afirmó que «todas han sido de primera».
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