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M. JOY El Oratori de Santa Catalina del Museu de la Mar, en el puerto de Sóller, ha sido el escenario escogido por el escultor Patrick Guino para presentar una cincuenta de esculturas en una exposición, abierta hasta el 14 de septiembre, a la que ha titulado Itinerario, ya que «se trata de un recorrido a través de mi universo personal», afirma el artista, y en la que se incluyen piezas creadas desde 1991.

«Muchas de mis obras están realizadas en piedras de Mallorca, incluso unas diez esculturas en piedra de ónix de Sóller», afirma Guino, quien desde hace ocho años reside en Bunyola.

El escultor se confiesa sorprendido por la riqueza de la Isla en este aspecto, «una riqueza que la mayoría de la gente de aquí desconoce», dice.
Para Guino, «la piedra ofrece una paleta de color fantástica», y asegura no tener una fuente de inspiración específica si exceptuamos su propia imaginación.

Es la primera vez que el Oratori de Santa Catalina acoge una exposición escultórica, y Patrick Guino ha confesado haber escogido el espacio por «tener un alma especial».

La muestra se divide en dos salas, una de ellas con amplios ventanales que ofrecen un espectacular paisaje marino y confieren a las obras una especial luz natural que cambia dependiendo del momento del día.