Miquel Ensenyat y Fina Santiago. | Jaume Morey

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Dentro de Més ha cundido una cierta preocupación con respecto al resultado del proceso primario que se celebra este sábado para designar al candidato a la presidència del Govern. Hay 'temor' a que la barrida de Miquel Ensenyat sea tan espectacular que deje 'invalidada' a Fina Santiago para ser una número dos creíble y con garantías en las autonómicas del año que viene. A la cúpula de Més le gustaría un resultado claro a favor de Ensenyat, pero «sin que llegue a ser una victoria aplastante y escandalosa que deje en ridículo a su adversaria».

Con más de 4.000 inscritos para poder votar, se 'sabe' que ha sido el grueso del PSM, que da su apoyo a Ensenyat, el que ha traído más gente a votar, mientras que el raquítico centenar de miembros de Iniciativa, que al menos en teoría están con Santiago, apenas han podido aportar un puñado más de nuevos electores. Tal diferencia, cada vez más evidente a media que se acerca la jornada electoral, se patentizó este jueves en el debate de Can Alcover entre Ensenyat y Santiago. La impresión que dieron ambos candidatos se convirtió en la comidilla interna de Més. Muchos hablan de un Ensenyat arrollador y de una Josefina «a la defensiva, nerviosa e imprecisa», y consciente de que «acude derrotada a las urnas, en plan alma en pena».

Respecto a la candidatura al Consell también se da «por probable» que Bel Busquets se impondrá a Guillem Balboa, «aunque en este caso el resultado será más apretado, más vendible, más digno para ambos», indican en Més. Este resultado, y en esto confían muchos, puede servir de positivo contrapeso a la «barrida sin precedentes a favor de Ensenyat» que se espera para la elección del candidato a la presidència del Govern.

Hay que tener en cuenta que Santiago está mucho mejor vista en el Consolat que Miquel Ensenyat, entre otras cosas porque la actual consellera de Benestar Social jamás hará sombra Armengol y, de ganar las primarias dentro de Més, saldría en la carrera electoral del 2019 con un aire de 'segundona' que favorecería el camino a Francina a repetir como presidenta. Con Ensenyat la situación es muy diferente. Quiere ser el candidato más votado de toda la izquierda, aspira a liderar los cañones del Consolat. De ahí que haya tantos nervios.