José Luís García, secretario general de CCOO Illes Balears | Pilar Pellicer

TW
28

A las puertas de iniciarse las negociaciones del nuevo convenio de hostelería, el más importante de Balears, el secretario general de Comisiones Obreras Illes Balears, José Lúis García, repite insistenbtemente dos mensajes durante la entrevista: «Revolución» y «No todo vale» .

¿Cómo está la negociación del convenio de hostelería?
— No hay negociación. Nadie se ha puesto en contacto con nosotros para hablar del tema y valoramos muy negativamente que no estemos permanentemente hablando del convenio, porque para nosotros no es una cuestión del momento de la firma o de la negociación final, sino que los marcos de ese convenio deben trabajarse durante su vigencia. Lo que necesita la hostelería es una revolución Si no transformamos el sector difícilmente mejorarán las condiciones laborales y de vida. Hay que revolucionar el sector y adaptarlo a la realidad que tenemos en la calle y en los centros de trabajo.

¿Por dónde pasa esta revolución?
— La subida salarial del 8,5 % en dos años del convenio vigente ha resultado insuficiente por la pérdidad de poder adquisitivo derivado de la inflación y también por el precio de la vivienda, que lo marca todo. Hemos sido solidarios en los malos momentos ahora toca redistrubuir mejor. Si no transformamos el sector, dificilmente mejorarán las condiciones laborales y de vida. La hostelería necesita una verdadera revolución.

¿Cuáles son las líneas rojas de CCOO?
— Los incumplimientos. Hay que establecer mecanismos que garanticen unas condiciones de trabajo dignas y decentes. Un ejemplo: no puede ser que todos los elementos de la plantilla de un establecimient figuren como ayudantes de camareros.

¿Los ha habido con el actual convenio?
— Sí. Vamos muy lentos en la mejora de las cargas de trabajo de las camareras de piso por falta de voluntad, aunque hay que decir que la herramienta es compleja. Nos llenamos la boca con la conciliación, la formación y la cualificación, pero a la hora de la verdad, nos frenamos. Nos estamos jugando el futuro del sector.

¿Cómo se debe afrontar la reducción de jornada laboral en una economía de servicios como la balear?
— Esto no va de tipo de sector, sino de derechos. Va de si queremos un país que apueste por la innovación o uno en precario.Llevaos desde 1983 con la jornada de 40 horas ocn lo que ha cambiado la economía, la empresa y la sociedad.

¿Tenemos o no un problema de productividad?
— El problema fundamental es el desacople entre la productividad y los salarios. A partir de la crisis financiera de 2008 y la reforma laboral de 2012, la productividad ha seguido subiendo con niveles muy superiores a los salarios.

Empezaron criticando a Prohens por su «falta de diálogo». ¿Les hace más caso ahora?
— Va mejorando. Seguimos trabajando para que, más allá de quién gobierne, haya una estructura de diálogo social compartida y respetada por todos.

Insisten ustedes en que los sindicatos no sólo estan para lograr mejoras laborales sino también de las condiciones de vida de los trabajadores y trabajadoras. Y en ese sentido, la vivienda es la base de cualquier proyecto vital. ¿Cómo valoran las políticas del Govern para facilitar el acceso de vivienda?
— Son gotas de agua en un océano, lo que no quita que sean necesarias porque algo se tiene que hacer. El de la vivienda es un problema global, complejo y poliédrico que no se puede afrontar desde una única perspectiva, pero creemos que el Govern debería ser más valiente y declarar Balears como zona tensionada. Se debería dar un mensaje de que no vale todo.

¿Han visto avances con este Govern en planes de ocupación, prevención y salud laboral y formación profesional?
— Podemos trabajar mucho en planes pero si no los dotamos presupuestariamente no son efectivos. El presupuesto del Soib baja y se mantiene el del Ibasal cuando somos una comundad con una elevadísima siniestralidad laboral. Estos prespuestos deberían crecer cada año si queremos tener políicas serias en prevención y salud laboral.

El Fòrum de la Societat Civil, del cual forma parte CCOO, ha abandonado el Pacto de Sostenibilidad. ¿Ha muerto el Pacto?
— El funcionamiento del Pacto no ha sido bueno. Desde CCOO Balears fuimos muy críticos con el marco estabecido, pero una vez lo hemos aceptado, tenemos muy claro que siempre trabajaremos por el futuro de nuestra tierra. Con nuestra portaciones en las distintas mesas intentamos que la fotografía de la comunidad que sala del Pcto e alo más real posible y ahra estaos esparando con muchas ganas la fse de propuestas para comprobar si hay una voluntad real de transfrmaciñon. El Govern tiene que liderar y no puede dejarlo todo al alburde lo que le vayan contando los diferntes agentes y entidades.

¿CCOO es partidario del decrecimiento turísitico aunque pueda afectar al empleo??
— Lo que tenemos claro es que este modelo de más turistas está agotado, y en eso hay un consenso generalizado. Hay que empezar a poner medidas sobre la mesa sobre el qué, pero también sobre el cómo: dónde decremos y de qué manera lo hacemos. También deberíamos aclarar que entendemos por decrecimiento.

El Fòrum propone menos jets privados, menos cohes de alquiler, menos plazas hoteleras, menos cruceros...
— No se trata tanto de decrecimiento sí o no, sino de ser conscientes de que nuestro modelo económico actual no es viable y lleva camino de explotar por su fuerte estacionalidad. Lo normal es abrir los negocios todo el año y se trata de poner límites para hacerlo viable sin que afecte al empleo. Debemos recordar que el sector servicios supone el 87 % del PIB y más de 400.000 afiliados a la Seguridad Social en Balears. El beneficio empresarial no puede estar por encima de las personas y ahora mismo está en el centro y es lo único que crece. No vale todo.