Una moto, tumbonas, sombrillas, una máquina expendedora de tabaco,
farolas, etcétera. Ésta es una pequeña selección de los objetos
extraídos ayer del fondo del mar en el muelle de Portocolom. En
total, unos 3.000 kilos.
La jornada de limpieza fue promovida por el GOB y el grupo
Squalo, con la colaboración del Ajuntament de Felanitx. La
intención era clara: Mejorar el estado del medio natural marino y
concienciar a la gente sobre la necesidad de respetar el litoral,
habitualmente tan olvidado. «Pretendemos demostrar que el problema
de los residuos no está sólo en la superficie, sino que también en
el fondo del mar. Queremos llamar la atención de los políticos»,
explicó Miquel Àngel Lobo, del GOB-Felanitx.
Participaron 16 buceadores, dos zódiacs y otras tantas
embarcaciones. La acción de voluntariado llamó la atención de
vecinos y extranjeros, que se acercaron hasta el muelle e,
incrédulos, contemplaron la «cosecha».
Lobo denunció que una importante cantidad de tumbonas y
sombrillas estaban en el fondo del mar y en las inmediaciones de un
solo hotel.
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