Unas sesenta personas participaron del acto. | R.P.F.

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Pollença ha sido este lunes por la tarde escenario de una emotiva concentración organizada por la Comissió de Memòria Democràtica de Pollença y el Ajuntament, en conmemoración del Día de los Derechos Humanos. Unas sesenta personas se reunieron en el evento, marcado por la defensa de los derechos de las víctimas del franquismo y la denuncia de la propuesta de derogación de la Ley de Memoria Democrática, prevista para aprobarse este martes.

El acto comenzó con la intervención del regidor de Memòria Democràtica, Miquel Àngel Sureda, quien contextualizó la relevancia del encuentro. El alcalde de Pollença también tomó la palabra, pronunciando un contundente discurso en contra de la derogación de la ley, al considerar esencial mantenerla para garantizar «el derecho de las víctimas» a la verdad, justicia y reparación.

Marina Llobera, exregidora que impulsó la creación de la Comissió de Memòria Democràtica de Pollença, también intervino para subrayar el valor de las políticas públicas de memoria. Uno de los momentos más emotivos de la tarde fue el testimonio de Pere de la Punta, nieto de Pere Josep Cánaves, un alcalde republicano de Pollença que fue asesinado durante la represión franquista.

El acto culminó con la lectura de un manifiesto que denunció la intención del Govern Balear de eliminar una ley considerada clave para el reconocimiento de las víctimas del franquismo. El manifiesto señaló que esta derogación supondrá un retroceso en derechos fundamentales. Fue especialmente crítico con el Partido Popular y su alianza con sectores ultraderechistas, calificando la derogación como «un ataque sin precedentes democráticos».

Los participantes hicieron un llamado a la sociedad a no retroceder en la lucha por la memoria histórica, reafirmando su compromiso con la verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición. La concentración se cerró con fuertes aplausos.