... mientras que el desfile del orgullo es cultural, reivindicativo y sobre todo muy lúdico, y la gente se lo toma como una parade para divertirse... los desfiles del orgullo católico, que son igual de frikis y hacen el mismo daño o más a la vista, con sus torsos desnudos llenos de llagas sangrantes y el patíbulo para ejecutar gente escenificando tortura y muerte, parece abducir a sus seguidores, que se lo llegan a creer algunos, intentando captar a otros espectadores que alucinan viendo que se lo toman tan en serio... ese es el problema
Es un circo patético que no debería escenificarse. Allá cada cual con su condición pero con discrección.
Si tuviera hijos pequeños, preferiría que no se encontraran por la calle un espectáculo grotesco, con hombres pintarrajeados y emplumados o mujeres besándose...me parece un poco fuerte y acepto la homosexualidad como realidad, existe y punto. Pero el espectáculo no me gusta nada.Ni para mis hijos.
En otras épocas, a pesar del analfabetismo de una gran parte de la sociedad, existía el sentido común. Hoy, en esta sociedad tecnológica, el sentido común se ha convertido en el menos común de los sentidos. Lo que puedo decir es que hay homosexuales que no participan en estos desfiles. No se sienten representados por este paripé.
No queremos reaccionarios ni salvapatrias ni nada que se parezca al fascismo,esta gente tiene el reloj parado en los años cincuenta,que se larguen del mapa politico dan repelus.Es
Está claro que afortunadamente nunca "pintaréis" nada en política, basta saber vuestra manera prehistórica de pensar que precisamente no pertenece a los tiempos actuales, vaya desfasados/as.
Por suerte aquí no pintan nada. No les ha votado ni el Tato.
Sin ser de Vox, ni mucho menos simpatizante, tengo que decir que esta señora tiene toda la razón.
Toda la razón le sobra, los demás partidos piensan lo mismo pero no son capaces de decirlo, esa es la diferencia. Viva Vox
A esta jerga de gente les quitas los espectáculos, el circo de mal gusto, la provocación, la mala educación, no les queda nada, ni siquiera un objetivo ni social ni educativo..., nada...