Las armas que tenemos en EEUU ha sido un desastre para mi país. Leed nuestros periódicos y veréis que el mayor número de víctimas mortales conocen intimamente a sus asesinos: son sus padres biológicos, sus padres no biológicos, sus novios, sus maridos, ex-maridos, vecinos, compañeros de colegio y trabajo y raramente gente ajena. Tampoco tiene nada que ver el multiculturalismo con el crimen. Las mujeres no hacen estas barbaridades, sólo los hombres. Hombres miedosos, cobardes, inseguros, fáciles de ofender y enfadarse, que prefieren el estima de otros hombres a la de las mujeres, muchas veces fracasados cuando viene a los estudios o el empleo, no se respetan ellos mismos. La vigilancia, la falta de anonimato entre vecinos, el preocuparse y protegerse los unos a los otros, el hablarse diariamente y conocerse es lo único que nos protege del crimen. Llamar a la policía cada vez que se ve algo extraño o fuera de lo normal, tener cámaras por todos lados. Vigilancia perpetua en EEUU.
Ningún país es perfecto, pero por lo menos en EEUU aún hay libertad de expresión y no te meten en la cárcel por defenderte demasiado bien cuando alguien asalta tu casa y te ataca a ti o a tu familia. Y, sí, las armas de fuego sí hacen falta para poder defenderse, sobretodo si eres mujer, si eres anciano o te vienen dos o tres o en manada. ¿Que las armas de fuego son peligrosas? Pues también lo son los cuchillos, las hachas, los coches y camiones, las piedras y hasta las teteras. Sólo hay que leer las noticias en Última Hora para saber qué usan los asesinos para matar a sus víctimas.