También es una pena que la verdad siente fatal a la gente. Nadie es más que otros para exigir administrar de los recursos para sí sin tener una formación ni a una preparación técnica y que la organización se pliegue porque si a sus demandas. La primera consecuencia es que con su demanda de atención excluyen al resto invadiendo espacios y tiempos del resto. Todos hemos presenciado situaciones invasivas de personas alteradas o de grupos con un número de integrantes desproporcionada. Eso intimida y más cuando se esta vulnerable y enfermo. Fuerzan a que el resto tengan carencias. A la sanidad se tiene que ir para sanar de la enfermedad.
A principios el siglo XX, algunos psiquiátricos aplicaban a sus pacientes tratamientos de electroshock. Un siglo después, la ciencia apenas considera esos tratamientos como una tortura inútil. La policía por el contrario, considera los Taser como una herramienta moderna... seguramente necesiten un siglo más para recapacitar.
Si, y en casos como este, también juegan con la vida de los ciudadanos a los que reprimen.
Vete con cuidado, que son muy elementales e igual no pillan la ironía.
Ya, pero los de Son Banya pueden golpear y morder a los agentes impunemente.
Por muy habitual que se de en estos casos se tiene que lamentar si o si. Y no es por ser tiquismiquis o por ser aprensivo. Se tiene que comprender el momento de pérdida y confusión de esos seres humanos e incluso anteponer eso a la escenificación y al espectáculo del dolor y padecimiento. La gente debe comprender que la sanidad pública NO ES SU ESPACIO. Es el espacio de los sanitarios y en ellos son la autoridad. Los pacientes tienen los derechos que se derivan del ser correctamente atendidos y de que se respeten sus derechos como persona pero no es nadie para administrar recursos, espacios ni organización. Se tiene que dejar bien claro que lo que es de todos tiene su gestión atribuida a profesionales y a una organización. Si se quiere una atención a su medida lo que tiene que hacer uno es rascarse el bolsillo
Emociona ver la valentía de las fuerzas del orden en acción, todo en pro del bien del ciudadano, bravo bravo grandes hombres valientes de la policía y demás fuerzas del orden. Con policías como estos nos sentimos muy muy muy seguros, es este caso ameritaba el uso de toda la fuerza que usaron ya que se trataba de una mujer muy muy peligrosa y armada.
Las imágenes pueden ser impactantes para el público en general pero por desgracia para los que trabajamos con pacientes con agitación psicomotriz esto es el pan de cada día y nuestra integridad física también es respetable. Son actuaciones en las que nadie disfruta, ni el agitado, ni sus familiares ni los profesionales que los reducen. Lo que me sorprende es que a las puertas de un centro de salud los agentes soliciten activación del SEM y no al personal del propio centro... porque será?..
Primero inmovilizar y luego administras un calmante de efecto inmediato, y listo, no tanta pelicula y tanto alboroto, reducirla y pinchazo, en un minuto calmada
Pero no os dais cuenta de que esta fingiendo el dolor? Como ha dicho este mismo periódico, y se ve en las imágenes era hostil y peligrosa. El taser se invento para este tipo de personas, y desde aquí les doy mi enhorabuena a los mossos por la actuación y la profesionalidad.