Seguramente, los vecinos que os oponéis la peatonalizar las calles, y los que aquí os quejáis de las terrazas, disfrutáis de ellas en otras zonas. Si se quitasen todas las terrazas también nos quejariamos.
Pere JoanTotalment d acord, Blanquerna qui l ha vista i qui la veu, plena de petits comerç abans i ara ple de kebabs, i locals sense cap tipo d encant, llevat de un o dos que valen la pena...
Totalment d'acord amb els veins. Basta veura el carrer Blanquerna
Cuando uno adquiere una vivienda en una zona determinada lo hace en base a las características de esa zona. Y en base a eso el esfuerzo de su ineversión es mayor o menor. Un piso junto a una terraza con ruido todo el día pierde valor. Creo que los vecinos deberían tener el derecho a elegir el cambio de usos de su calle.
Hay que darle ocio a los que están chupando del bote en invierno. En verano están en erte
Me pregunto sobre el impacto de dichas peatonalizaciones sobre la contaminación acústica. Podríamos imitar a otras ciudades que han deslocalizado el ocio hacia muelles obsoletos, pero creo que la medida no agradaría a los propietarios de bajos comerciales. Para el ruido, también hay la solución de los porches y galerías, un acierto que debemos al urbanista Miquel Alomar en Jaume III y Passeig Mallorca.
Y tienen toda la razón! La ciudad se convertirá en un gigantesco y ruidoso bar.
Ya no hay quien aparque en Palma. No se entiende que despues de autorizar el afiro completo a las terrazas. Aun les regalen las calzadas las aceras y todo ello sin cobrarles. Mientras los que estan situados en calles estrechas sin terraza estan condenados a la ruina total sin poder abrir sus locales o con horarios absurdos y demenciales. Simplemente vergionzoso.
Existe algo mas repugnante y chusma que un “movimiento vecinal”? Escucho ideas.
¿Mas terrazas?. Si ya no hay manera de aparcar en la ciudad. Esto se ha convertido en una verbena diaria. Y ademas les permiten aforo vompleto mesas a discreccion en la calzada y no pagan impuestos. Vaya loteria. Mientras los pobrecitos que tienen su local en una calle estrecha sin posibilidad de terracita. Llevan meses cerrados sin poder abrir y no pueden acceder a ayudas para pagar sus deudas porque deben algo a la seguridad social o a lo que sea. Esto ademas de un puro desastre es un desvario causado por unos gobernantes ineptos y de nula empatia ciudadana. Que triste.