Y ahora pedro tiene otro frente abierto con el alcalde que apoya la tortura.a los partidarios de festejos con animales deberian de sancionarlos y tambien a los asistentes por sadismo.pero en este pais lleno de ignorantes ya no me extraña nada,tal vez gane las elecciones el pp y todo

Zoquete! de que cultura estás hablando si ni siquiera sabes expresarte ni escribir correctamente? primitivo eres.

ya está bien de matar y torturar animales.. que suelten a todos los pajaros de las jaulas, que dejen de montar caballos. que aberración ¡ imaginate que se nos subieran los caballos a la grupa y nos hiceran correr como pasa en menorca, por ejemplo..Dejad sueltos a los perros, que es eso de mantener a perros en sitios pequeños todo el dia,, esperando a que al ser humano le plazca sacarlos a pasear , atados.. imaginenese al revés,,

No matan al toro pero permiten el resto del "espectáculo". ¿Donde está la victoria? Si el toro, después de lo que le hacen padecer, seguramente lo que desea es la muerte. Hay que acabar con el espectáculo infame de sufrimiento que conlleva esa"cosa". La muerte es "sólo" la guinda del pastel.

Ya ta, an conseguio quita la cultula de pueblo. los que no quieren cultula ni alte ni quieren epaña an ganao. probe de lo que queremo epaña su alte y su cultula. acabaemo tos maiquita poque no guta ver un ombre baliente ganando a la betia. sos unos cobades y inculto

O SEA TORTURAR SI.

Ya era hora que se prohibiera la barbarie disfrazada de tradición por ley!!

molt bé la prohibició, però resulta insuficient. el fet de matar ò no matar a un animal, és irrelevant i té poc que veure amb la festa i la diversió que generen la tortura i la crueltat que pateixen els animals abans de ser sacrificats en un escorxador ò no.

Y coincidiendo con el Toro de la Vega, otra crueldad peor estos mismos días en china, busquen " festival perro yulin", pobres animales.

Es increible que, en ese pueblo, sigan defendiendo la legitimidad de esa crueldad con el argumento de la tradición. Creo que el sadismo se llega a instaurar en las mentes que se acostumbran a divertirse con el sufrimiento de seres vivos. Esa población arrastrará, durante muchos años, la vergüenza de lo que permitieron.