Yo a todos estos que hablan, les daría de su propia medicina en el IRPF de sus maridos y de sus mujeres, a ver lo que ocurría.
Hasta que él llegó, no se sabía lo que era la lucha contra la corrupción. Muchos funcionarios cubren el expediente y cobran a fin de mes. No es el caso del Sr. Horrach. Como fiscal está obligado a defender la legalidad, aunque sea de una infanta. Lo bochornoso es la campaña mediática que se ha orquestado. Lo bochornoso es que haya jueces con una avidez desmedida de pasar a la historia y una falta absoluta de valor en otros jueces que lo han permitido. Tiempo al tiempo.
Para el que firma "a los de abajo" te diré que al que cumple con su cometido no hay porqué agradecerle nada, era su trabajo y su obligación. A este hombre se le reprocharà siempre su afan desmedidoven defender a la Infanta cuando no era su principal cometido. Si como fiscal se hubiera limitado a "archivar sus actuaciones"en este caso , era la lógico y no empeñarse en ejercer de abogado denensor...bochornoso.
La gente no está acostumbrada a la honradez. Este hombre, en contra de todos, se ha mantenido en su posición. Valiente fiscal. El tiempo le dará la razón
Triste y decepcionante final para una carrera de prestigio , pero "la sombra del poder (del rey emérito ) es alargada " y ha terminado engullendo a un gran fiscal que ha acabado sucumbiendo a la voluntad de los poderosos vendiendo su alma y su credibilidad , inexplicable para la mayoría de los ciudadanos.
Sois una pandilla de ingratos. Nunca se le agradecerá lo suficiente el trabajo hecho. Me gustaría saber de donde mamáis tanta mala baba.
Se podía haber ido antes, la verdad...
habra que seguir la trayectoria laboral del sujeto una vez que ha ejercido como abogado defensor de la familia real ... a estar atentos estos proximos meses/años de lo bien que le va a ir en el sector privado desde luego ha quedado muy bien con la casa real... lo dicho a estar atentos...
Tipo como este es mejor que se larguen de la función pública.
La medida del "empeño" de Horrach es la medida de los feroces ataques que han sufrido él y la infanta. Y tiene toda la autoridad moral que le da haber sido el director de la instrucción. Y Castro debería tener la grandeza de decirlo públicamente no solo en privado, como tantas veces ha reconocido.