Bueno ahora los chiringuitos son de madera, hablan catalán mientras te curan y si hay posidonia todos contentos. Eso sí a pagar.
Yo soy el padre de la niña y le prendo fuego al chiringuito...hace muchos años q dejé de creer en la justicia terrenal. Mi criterio es: "ojo por ojo"
ya se a que playa no debo ir con mi hijo...no a las playas con cristales... si no vamos a lo mejor el ayuntamiento o el del chiringo tienen un poco mas de cuidado y realizan acciones de PREVENCIÓN para evitar estos casos.
Situación dificil, lo siento por la niña. Aunque yo no dejo a un peque de esa edad jugando en la arena cerca de un chiringuito, ni descalzos ni sin camiseta...
A los inquilinos de los Ayuntamientos, que no tienen empatía alguna, sólo les interesa recaudar dinero, y eso se les da muy bien. Y la justicia........, como siempre, protegiendo al débil.
Es imposible saber si esa botella venía del chiringuito o de algún desgraciado que la trajo de casa.
Sa botella no l haurien d haver tirada i sa cala hauria d estar neta. Però d aquí a voler responsabilitzar a s Ajuntament o a n es Chiringuito.. N hi ha un bon tros. Jo veig ben normal que no te donassin sa raó a n es jutjat, perquè no la tens. Això és com quan t aixeques es vespre, a pixar, mig adormit, descalç i amb es llum apagat i sense voler fots una puntada de peu a una cadira que està enmig de sa sala. Qui té sa culpa?. Sa cadira?. Es qui la va deixar allà?. O tú per aixecar te descalç i amb es llum apagat?. Vareu tenir una desgràcia. D això no n hi ha dubte. Esper que se recuperi.
Y no olvidemos al socorrista que está más pendiente de realizar labores de acuataxi para los ricos que llegan en su barquito, que a realizar su verdadera función....esos dejan más propina....
Mi apoyo total a esa familia !!!
Espero que este lamentable accidente no vuelva a darse en ningún lugar. Primero porque los padres tenemos que prestar más atención a nuestros hijos cuando están en la playa, más todavía si ese día hay oleaje, cuando yo era un niño en la playa siempre estaba con las zapatillas de esqueleto, no podía meterme en el agua hasta que no hubiesen pasado 2 horas desde que comí, nunca estaba sin la constante supervisión de un adulto, y eso era en una época en la que uno no corría el peligro de pincharse con la aguja que un drogadicto pudiese haber dejado tirada, una época en la que no habían botellones y fiestas nocturnas en la playa, eso era en una época en la que los padres ejercían como tal y no descuidaban de sus hijos, hoy vivimos en una época en la que los padres están más pendientes de sus móviles, de sus redes sociales y de sus mensajes en whatsapp que de los hijos y después pasa lo que pasa, no se si esos tiempos pasados eran mejor o no, que juzgue cada uno.