Han ganado los millonetis ricos, de los que Cort se supone que tiene que defender a los pobres. Y lo próximo será perder contra las vtc's, para mayor alegría de otros millonetis que arruinarán a varios miles de familias. Madre mía, con la izquierda.
Me pareix molt bé. No volem ningú als peus de la Seu.
Era una parada virtual, de facto, sin señalización. En la que ha tenido que intervenir un juez para suplir el mal hacer de unos funcionarios y unas autoridades locales que parecen haber aprendido su oficio en la agreste comarca de Babia (pero cobrando la nómina mensual religiosamente). ¿ se pondrán por fin las pilas o seguirán compitiendo con los gansos ?
Los vecinos? Todos hemos ganado!
A ver si es verdad que estos señores respetan (aunque sea una vez) el Reglamento de Circulación. Este es uno de esos gremios que aún conserva privilegios feudales: ¿tiene sentido que hoy día el transporte público se reserve a taxistas en régimen de oligopolio? ¿por qué no se liberalizan las licencias VTC, para que cualquiera pueda ofrecer el servicio de taxi (con los mismos derechos y obligaciones)? ¿Por qué asusta en este país la competencia empresarial? Para mí la respuesta es clara: han permitido un círculo vicioso con eso de poder vender las licencias (que, en mi opinión, deberían reverter a la administración para su posterior adjudicación a quien correspondiese por mérito).
Bravo!!! Hay que parar los pies a la mafia del taxi.
Cort, sois basura.
muy bien! aver si por el mero echo de ser taxista seran mejores que cualquier hijo de vecino....
Estos indeseables y cobardes de Cort no querían polución visual y echaron a los vecinos del barrio. Resulta que los taxis o recogida ridícula de basura con el nuevo sistema no es polución visual. Lo que hay en Cort es mucho sectario y ridículo. Tienen que ser los pobres vecinos los que se defiendan del pésimo trato recibido. Enhorabuena asociación de vecinos, sois estupendos, dais una lección de democracia ante el abuso y prevaricación.
Endvant es pacte. Más cursis y engolados no pueden ser. Sus adeptos y el pacto propiamente dicho.