TW
0

JAVIER JIMÉNEZ
Una mujer se personó ayer en el juzgado de guardia de Palma y denunció que su hermana ha sido recluida en el hospital psiquiátrico sólo dos días después de dar a luz, con lo que su salud peligra porque ha perdido mucha sangre.

Según el relato de esta mujer, su hermana ya padecía desequilibrios mentales y entraba y salía del psiquiátrico con cierta frecuencia. El pasado día 30 de septiembre fue hospitalizada en Son Dureta y horas después dio a luz a una niña, que nació en perfecto estado. Sin embargo, la madre perdió mucha sangre y necesitó de transfusiones. Con el nacimiento de la pequeña el estado emocional de la madre empeoró y los médicos consideraron adecuado volver a ingresarla en el Hospital Psiquiátrico, mientras la familia era informada de su situación y los servicios sociales se hacían cargo del bebé. Según consta en la denuncia interpuesta en el juzgado, el sábado una enfermera del Psiquiátrico se puso en contacto telefónico con la familia para explicarles que la paciente estaba muy débil por la sangre que había perdido, y que su estado era grave. Los allegados hablaron con uno de los médicos del centro, pero no quedaron satisfechos y por ese motivo decidieron interponer una denuncia. Ayer se barajó la posibilidad de que el forense de guardia acudiera al Psiquiátrico a examinar a la interna, pero finalmente no trascendió si se llevó a cabo la visita. Fuentes próximas al Psiquiátrico informaron de que todos los pacientes que ingresan son sometidos a revisiones médicas para comprobar en qué estado llegan y más si se trata de una madre que acaba de dar a luz. Además, añadieron que siempre hay un médico de guardia en el centro.