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«Hoy es un gran día porque la educación puede cambiar el mundo, forma a la gente que apostará por una buena economía, la igualdad y la dignidad» con estas palabras el presidente del Govern, Francesc Antich, inauguró ayer de manera oficial, junto al conseller d'Educació i Cultura, Bartomeu Llinàs y el alcalde de Binissalem, Jeroni Salom, el nuevo colegio público de Educación Infantil y Primaria de Binissalem.
El CEIP Binissalem cuenta con una superficie de 3.166 metros cuadrados y tiene una capacidad para acoger a 450 alumnos, aunque en la actualidad los estudiantes matriculados no superan los 300. El nuevo centro dispone de dos líneas de enseñanza y cuenta con 6 aulas de infantil, 12 de primaria, una de psicomotricidad, otra de informática, biblioteca, comedor, cocina y gimnasio.
A pesar de que la inauguración oficial del edificio se realizó ayer, los alumnos empezaron a disfrutar de sus instalaciones desde le pasado 11 de enero, cuando abandonaron las dependencias del centro escolar Nostra Senyora de Robines. El CEIP Binissalem había sido reivindicado en diferentes ocasiones por su comunidad escolar, ya que las infraestructuras de Nostra Senyora de Robines habían quedado pequeñas y se tuvieron que instalar hasta diez aulas prefabricadas en el patio, la entrada y las calles colindantes del colegio.