El tenista español Rafael Nadal, acompañado del director del torneo, Albert Costa, durante la rueda de prensa . | Andreu Dalmau

TW
0

Rafael Nadal confirmó ayer, en un multitudinaria rueda de prensa que tuvo lugar en las instalaciones del Real Club de Tenis Barcelona, que la renuncia a disputar el 58 Trofeo Conde de Godó se debe a cuestiones de carácter estrictamente preventivo. «Mi objetivo es estar al cien por cien cada vez que salga a competir y jugar tres semanas seguidas podría significar dejar de estar bien», declaró el número tres del mundo.
El tetracampeón de Roland Garros argumentó que «estoy siendo lo más cauto posible para poder jugar lo mejor posible durante el máximo de tiempo que pueda», y expuso que «cuando estoy bien, puedo entrenarme y jugar sin problemas, y entonces sé que tengo bastantes opciones de poder hacer buenos resultados».
El manacorí se mostró «muy contento de haber ganado en Montecarlo porque me ha dado mucha confianza en una semana muy emocionante, y ahora pretendo prepararme bien para Roma e intentaré jugar en Madrid», y añadió que «por suerte, el calendario cambiará el próximo año y podré competir de nuevo en Barcelona». Nadal aclaró que «de la rodilla estoy bastante bien después del problema que tuve en Australia», y reiteró que «no tengo ningún problema físico, estoy perfecto, y no jugué infiltrado en Montecarlo».
El balear ha calificado de «barbaridad» pensar que puede estar lesionado después de adjudicarse, con la autoridad que lo hizo (cediendo sólo 14 de 74 juegos disputados) su sexto título en Montecarlo el domingo pasado. Precisamente por eso, porque se encuentra en un momento muy dulce, porque está jugando «a un grandísimo nivel», quiere que dure el máximo tiempo posible, cosa que pasa por mimar su cuerpo, «Para que mi tenis esté bien tengo que estar físicamente bien y es el objetivo principal», apuntó.
El balear recordó que «el año pasado fue una experiencia muy difícil para mí y tuve que vivir momentos poco agradables y, con los años, tienes más experiencia y te vas conociendo mejor». Además, también añadió que «no tenía previsto no competir en Barcelona, que quede claro. El tenis no es como el fútbol. Tú no sabes los partidos que vas a jugar, y planificas el calendario en base a los partidos no a los torneos. Si hubiese llegado en Montecarlo y perdido el miércoles, lo normal es que hubiera jugado aquí».
El jugador zurdo insistió en que «muy a mi pesar, no jugar aquí es un golpe duro porque es un torneo que me encanta, que se juega en mi club, en Barcelona, en mi casa, y que se adapta muy bien a mi juego».
No obstante, el mallorquín defendió el prestigio del torneo por encima de los nombres que formen el cartel de participantes y contó que «el Godó tiene una gran historia y su prestigio no depende de que acudan al torneo los cuatro primeros jugadores».
Por su parte, Albert Costa, director del Conde de Godó, destacó que «con la ausencia de Nadal, a los demás jugadores se les abre ahora un camino».