El ex president Gabriel Cañellas junto a su abogado tras prestar declaración ante la policía. | Guillem Picó

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El ex president de Govern Gabriel Cañellas declaró ayer como imputado en la llamada 'operación Bomsai', que investiga las supuestas irregularidades en la adjudicación de los proyectos del nuevo parque de bomberos de Palma y de la sede de la Conselleria de Salut por parte de la empresa pública CAIB Patrimoni. La vinculación de Cañellas con el caso se produce al detectarse una factura librada por su empresa, Cañellas Consultores S.L., contra Atlas Capital.
Atlas Capital es el bufete al que el contrato de CAIB Patrimoni obligaba como asesoría jurídica de las empresas adjudicatarias de las obras durante el período de vigencia del 'peaje a la sombra' (sistema de explotación de las obras para diferir su coste durante 30 años con cargo a los presupuestos). Las empresas adjudicatarias de las obras debían pagar a Atlas Capital el 1'8 por ciento del importe, aproximadamente 600.000 euros. La Fiscalía Anticorrupción sospecha que esta cláusula encubría un posible desvío de fondos públicos al Partido Popular o el pago de sobornos.
Unos honorarios
Cañellas explicó que su relación con Atlas Capital, por medio de su empresa Cañellas Consultores S.L., se remonta al año 2006 medianta «una factura correspondiente a mis honorarios profesionales en una operación para la venta de una empresa mallorquina, a través de Atlas Capital, a una empresa de fuera de la Isla».
Además, el ex president del Govern quiso precisar que su relación con Atlas Capital «no tiene ninguna conexión con la 'operación Bomsai' ni con CAIB Patrimoni ni con la Conselleria d'Economia».
Por último, Gabriel Cañellas señaló que «se han aportado a la Policía y la Fiscalía toda la información de las personas que intervinieron en la operación de compraventa para la corroboración de los datos, así como de toda la documentación disponible».
Investigación policial
Durante su presencia en las dependencias de la Jefatura Superior de Policía Gabriel Cañellas fue advertido de que, según explicó él mismo, «se trata de una investigación policial y no judicial».
No obstante, el ex president no ocultó que la declaración, que se prolongó por espacio de treinta minutos, «la hice en calidad de imputado», según se detalla en la citación que le entregaron dos funcionarios en las primeras horas de la mañana de ayer en su despacho.
A la declaración del ex president asistieron Pedro Horrach y Miguel Angel Subirán, fiscales Anticorrupción, así como integrantes del Grupo de Delincuencia Económica del Cuerpo Superior de Policía.
Una vez finalizó su testimonio, Gabriel Cañellas, acompañado de su abogado, se dirigió a su despacho para recoger toda la documentación referida a la operación de compraventa intermediada con Atlas Capital, la cual fue aportada de inmediato a los investigadores.
A la salida de las dependencias policiales, Cañellas trató de eludir las preguntas de los informadores al comentar que «he venido a renovar el carnet de identidad». El intento fue vano ya que a los pocos minutos todos los medios de comunicación se hicieron eco de la imputación del ex president en la 'operación Bomsai', el cuarto político del PP que figura implicado en este asunto.