La española María José Martínez alza el trofeo obtenido al ganar a la serbia Jelena Jankovic en el Masters de Roma. | Reuters

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María José Martínez Sánchez ha entrado en la historia del tenis español al conquistar hoy la final del Internacional de Roma, tras derrotar por 7-6 (5) y 7-5 a la serbia Jelena Jankovic, número siete del mundo, en un encuentro espectacular.

La tenista murciana firmó un festival de golpes espectaculares que la llevaron a derrotar a Jankovic, ex número uno del mundo y que el lunes alcanzará la cuarta posición en el ránking del WTA, en dos horas y veinte minutos.

«Ha sido un torneo increíble», afirmó la tenista de Yecla, que ha entrado en la historia tras convertirse en la tercera tenista española que alcanzaba y además ganaba la final de un torneo de esta categoría, la «Premiere».

Sólo Arantxa Sánchez y Conchita Martínez habían disputado finales del máximo nivel, siendo además la segunda de ellas la última española en jugar y ganar una final de esa categoría: Berlín 2000.

Además de repetir el triunfo de Nadal en Roma, tras imponerse sobre David Ferrer, Martínez Sánchez ha emulado a Lili Alvarez (primera ganadora del torneo en 1930) y Conchita Martínez (4 títulos consecutivos), las únicas españolas que han ganado este torneo.

«Lo dedico a toda la gente que ha estado conmigo en lo bueno y en lo malo. Es ahora, cuando está saliendo todo lo que he trabajo en estos años», dijo la murciana, que se lleva con este triunfo el premio de 350.000 dólares.

María José mañana ya estará en España para disputar el torneo de Madrid, pero aseguró que antes lo celebrará «con una gran cena».

La tenista murciana conquistó Roma no sólo con la victoria en la final, sino también firmando un juego que no se veía desde hace años en el Foro Itálico y que encandiló al público, que la premió al término del partido con una gran ovación.

Durante el encuentro, la española hizo una primera parte del set inicial impecable, pero con un 5-2 en el marcador y un punto de set en la raqueta se dejó llevar por la emoción. La serbia fue implacable dio la vuelta al marcador forzando el decisivo decimotercer juego.

Sin embargo, la murciana demostró que no tiene miedo a ninguna jugadora como ha demostrado al ganar, entre otras, a la número dos del mundo, Caroline Wozniacki, a la serbia Ana Ivanovic o la italiana Francesca Schiavone.

En la primer manga, Martínez Sánchez empezó sirviendo muy bien y enseguida dejó claro su juego, subiendo a la red y volviendo loca a su rival con sus dejadas y voleas.

La española ganaba fácil con su saque y ponía en dificultad en numerosas ocasiones el servicio de la serbia, coleccionando hasta cuatro bolas de ruptura.

La zurda de Yecla también aguantaba los intercambios largos y, en el cuarto juego, se puso 15-40; y, con una nueva dejada, rompió el servicio a la número siete del mundo, colocando un favorable 3-1 en el marcador del Campo Central del Foro Itálico.

La tenista de Belgrado, pese a su notable físico, no podía hacer nada ante el recital de dejadas y voleas de su rival, lo que provocaron su desesperación en varias ocasiones.

A veces, una serbia irritada parecía preguntarse a qué tenis jugaba su adversaria, ante las continuas dejadas que la hacían correr adelante y atrás de la pista.

«Me ha matado con tanta dejada», afirmó tras el partido la tenista serbia.

La yeclense demostró hoy que además de tener un «tenis atípico», como ella lo define, también sabe responder a los golpes desde el fondo de la pista y así se colocó con un 5-2.

Con la posibilidad de hacerse con el set, a la murciana le temblaron las manos, y perdió su servicio. La serbia no lo desaprovechó, sacó toda su fuerza y completó su remontada de tres juegos seguidos que ponían en marcador a su favor (6-5).

Pero hoy María José no tenía intención de dejar escapar un set que había sido suyo desde el principio y, con la vuelta de sus notables golpes, volvió a romper el juego a su adversaria y forzó el decisivo decimotercer juego.

Martínez Sánchez volvió a sacar algunos golpes espectaculares y se llevó el primer set, por 7-6 (5), en 1 hora y 24 minutos.

Con el primer set en el bolsillo, la de Yecla empezó a jugar en el segundo como lo había hecho en el inicio del encuentro. Volvió imponer su tenis, rompiendo el ritmo a la serbia con las voleas. Se hizo con una nueva rotura del saque de su rival (2-0).

Pero de nuevo, María Jose sufrió un bajón con su saque en el sexto juego, incluso cometió una doble falta, y la serbia lo aprovechó y empató el encuentro (3-3).

El séptimo juego fue uno de los más espectaculares. La española encantó al público sacándose de la manga dos grandes golpes con un juego de muñeca que dejaron con la boca a abierta también a su rival.

Con otros dos errores gratuitos de la serbia, la murciana rompía de nuevo el servicio a la tenista de Belgrado. Se ponía con 5-3. Tenía su saque para sentenciar el partido, pero falló; y Jankovic igualó la contienda (5-5).

Pero la final era de la española, se la había conquistado con golpes geniales, y fue entonces cuando se inventó dos paralelos ajustados a la línea que la dieron el saque de Jankovic, en la segunda oportunidad de que dispuso.

Ahora ya con su saque, María José Martínez no perdonó. Su servicio angulado y una nueva dejada, que dejó incluso sentada a Jancovic sobre el polvo de ladrillo, la daban una primera bola de partido que materializó con otro gran golpe.

María José Martínez se tiraba al suelo, festejaba su primer gran triunfo en el circuito y, catorce años después, emulaba a Conchita Martínez en Roma. Se convertía en la Reina del Foro.

Además, es la primera vez que los tenistas españoles dominan el torneo de Roma, tanto en la versión masculina como en la femenina, en un mismo año.