Una bañista observa que el agua está turbia por las obras. | S. Amengual

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La comisión de Infraestructuras informó ayer favorablemente de que el pleno del Ajuntament de Palma inste al equipo de gobierno a exigir a la Conselleria de Medi Ambient la paralización inmediata de las obras que se están realizando en el Torrent de Sant Jordi. La proposición también contempla «el compromiso de no reiniciarlas hasta que no se tengan las garantías necesarias que eviten las molestias creadas». En concreto PP y UM votaron a favor de esta proposición presentada de urgencia por el grupo municipal popular ; el equipo de gobierno se abstuvo.

El portavoz del PP en Cort, Julio Martínez, se mostró ayer muy crítico con la postura del equipo de gobierno. «Hoy (ayer para el lector) hemos visto que la Platja de Palma sigue siendo otra de las barriadas olvidadas de Calvo. No es normal que la oposición tenga que proponer la paralización de una obra del Govern en plena temporada alta, que está dañando nuestra imagen en una zona turística tan importante. Calvo debería haber actuado de oficio», aseveró Martínez.

Los populares animaron al equipo de gobierno a visitar la Platja de Palma para conocer el estado del agua. El teniente de alcaldesa de Mobilitat, José Hila, recordó que estas obras se están ejecutando para evitar la proliferación de mosquitos en el Pla de Sant Jordi y atribuyó que la suciedad del agua puede deberse a los bombeos que está realizando Emaya.

Mejora

Por su parte, el presidente de la asociación de Hoteleros de la Platja de Palma, Francisco Marín, manifestó su desconcierto ante la abstención del equipo de gobierno, ya que aseguró que se han comprometido a paralizar las obras para evitar las molestias. No obstante, Marín reconoció que la situación ha mejorado, «aunque el agua no está como debería». En opinión del presidente de la asociación de Hoteleros de la Platja de Palma, «es de sentido común que en pleno mes de agosto no se pueden limpiar torrentes» que desembocan en playas.

Como ya adelantó Ultima Hora las actuaciones que provocan una mayor suciedad del agua ya se han terminado y la Conselleria parará los trabajos que generen más suciedad hasta después de la temporada alta. Las obras comenzaron el pasado mes de octubre y tenían un plazo de ejecución de seis meses, por lo tenían que tenían que haber terminado en abril. Sin embargo, las abundantes lluvias de este año han ralentizado los trabajos.