TW
0

El diagnóstico de cáncer linfático del presidente de Paraguay, Fernando Lugo, generó preocupación entre los principales líderes políticos del país, quienes esperan que los problemas de salud del mandatario no le impidan cumplir sus funciones. Lugo, un ex obispo católico de 59 años, fue sometido días atrás a una cirugía para extirparle un ganglio en la zona inguinal que permitió detectar la enfermedad, aparentemente en estado inicial. Pero ahora se le ha detectado un segundo tumor en la región del tórax.