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BÀSQUET MALLORCA 82
MELILLA BALONCESTO 81

BÀSQUET MALLORCA (18+20+19+19+6): Shaun Green (10), Jeff Bonds (5), Marc Blanch (11), Joan Riera (9), José Amador (15), -cinco inicial- Alberto Alzamora (6), Carles Bivià (10), Llorenç Llompart (5), Israel Pampín (11) y Elhadji Diop (0).
20 de 45 en tiros de dos puntos, 7 de 33 en triples y 21 de 25 en tiros libres. 44 rebotes (28 defensivos y 16 ofensivos) y 27 faltas personales.
MELILLA BALONCESTO (18+32+15+11+5): Rafa Huertas (5), Jorge Jiménez (3), Jason Robinson (22), Roberto Morentín (21), Ondrej Starosta (2), -cinco inicial- Juanma Ruiz (4), Taylor Coppenrath (15), Héctor García (2), Nacho Romero (7) y Óscar González (0). 21 de 52 en tiros de dos puntos, 7 de 18 en triples y 18 de 27 en tiros libres. 42 rebotes (29 defensivos y 13 ofensivos) y 24 faltas personales.
Àrbitros: Uruñuela Uruñuela y González Cuervo. Eliminaron por cinco faltas personales a Shaun Green, José Amador y Roberto Morentín.
El sueño del 'playoff' sigue vivo. Y es que el Bàsquet Mallorca se ha propuesto rubricar la temporada colándose en la guerra por la ACB. La victoria, en la prórroga y tras ponerse cuesta arriba el partido ante el Melilla (82-81), permite a los de Xavi Sastre llegar a la última jornada con opciones de acabar la temporada regular entre los nueve mejores, con el permiso del resto de implicados, como La Palma.
El cinco naranja se apoyó en la solvencia de una rotación en la que todos respondieron. En especial Alzamora y Amador, que se hicieron fuertes ante el potencial interior norteafricano. Y eso que las cosas no comenzaron bien. Tras la canasta inicial de Amador, un 0-14 a favor del Melilla pareció oscurecer el horizonte. Dos triples de Pampín y Riera enchufaron a los baleares, que igualaban la cita (18-18), aunque los visitantes se encargaron de marcar diferencias camino del descanso. El Melilla adquiría una máxima de quince (34-49) para irse al vestuario doce abajo (38-50).
Le costaba al Mallorca recortar distancias, pero en el arranque del parcial decisivo, el acierto desde 6'75 de Bivià y Green permitió rubricar un 8-0 que más tarde ayudaba a culminar la remontada (71-70). Dos tiros libres de Coppenrath y la falta de fortuna llevaban a la prórroga (76-76), en la que pese a las eliminaciones de Green y Amador, un robo y canasta de Blanch y los errores del Melilla dejaron en Inca una victoria que ilusiona.