Los agentes realizaron nueve registros e identificaron a un gran número de personas. | Alejandro Sepúlveda

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La macrorredada llevada a cabo el viernes noche en el poblado de Son Banya se saldó con ocho detenidos, la incautación de 281,5 gramos de cocaína, 300 papelinas de heroína, 10 gramos de hachís, 30 pastillas de trankimacines y una pequeña plantación de marihuana, así como la intervención de 30 piezas de joyería, cinco balanzas de precisión y 61.481,86 euros en efectivo.
Un total de setenta agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) se desplegaron por el poblado a partir de las 20.15 horas y el dispositivo, en el que también estuvo presente el juez de guardia, duró varias horas. Ayer la policía informó de los resultados de la intervención, bautizada como 'operación Oriente'.
Desde el CNP se indicó que el operativo se realizó tras una labor de tres meses de investigación llevada a cabo por el Grupo de Estupefacientes, sobre la venta de sustancias estupefacientes en el poblado por parte de los clanes de El Charly y El Moreno.
Registros
Los agentes efectuaron un total de nueve registros en las calles cuatro y cinco del poblado. Los detenidos, pertenecientes a los citados clanes, son seis ciudadanos de nacionalidad española, un marroquí y un paraguayo. Además de la droga se intervino diversa documentación y anotaciones manuscritas, que serán objeto de análisis por parte de los investigadores, por lo que la operación continúa abierta.
Los detenidos fueron trasladados a la Jefatura de Policía de Palma para prestar declaración y pasarán a disposición judicial entre hoy y mañana.
Antes, en las chabolas del poblado había puertas blindadas para retardar la entrada de la policía, ya que los agentes tenían que derribarlas. Durante este tiempo, los sospechosos tenían tiempo de deshacerse de la droga. En esta ocasión, los agentes se han encontrado que cada dos o tres chabolas, en zonas comunes, hay pequeños búnkers donde se vende la droga. Cuando los agentes preguntaron de quién eran estos búnkers, los habitantes del poblado, hábilmente, respondieron que no lo sabían y es dificultoso probar exactamente a quién pertenecen los citados búnkers.