TW
0

La crisis también tiene sus consecuencias en la recogida selectiva del papel y del vidrio. Así se pone de manifiesto en los últimos datos facilitados por el Departament de Medi Ambient del Consell de Mallorca. Entre enero y marzo de este año se recogieron 2.909 toneladas de papel y cartón, un 1 por ciento menos que en el mismo periodo de 2009. Asimismo, de vidrio se recogieron 2.190 toneladas, un 2 por ciento menos que en el primer trimestre del año pasado.
Josep Ferrà, director insular de Gestió de Residus, indica que la explicación está en que se consume menos, no en que se haya moderado el hábito de reciclar. «De ser así hubieran aumentado los desechos, y eso no ocurre, al contrario, se han reducido un 4 por ciento. La crisis ha repercutido en que el ciudadano consuma menos», indica.
Envases
Aumenta, sin embargo, la recogida selectiva de envases en un 4 por ciento, pasando de 1.199 a 1.245. Este dato que, en principio, podría ser positivo, no lo interpreta así Ferrà. A su juicio, «están bien todas las campañas que se han realizado para concienciar a la población de la recogida selectiva, de separar los residuos, pero también se trata de consumir cada vez menos productos envasados, es decir, que es positivo separar, pero tan importante o más es que se consuman menos productos con recipiente, y el Consell ha de ser un elemento de presión en este sentido y sensibilizar para que el ciudadano sea más exigente a la hora de la compra».
Los residuos orgánicos (que se aprovechan para la elaboración de compost) también han aumentado, en este caso, de forma considerable. Un 23 por ciento. Este crecimiento sí que es importante. «Es positivo y se debe a un trabajo bien hecho de una serie de ayuntamientos al poner en marcha la recogida selectiva de residuos puerta a puerta. Se está concienciando a la gente de la necesidad del reciclaje», asegura el nuevo director insular de Gestió de Residus.
Hábito
Aún así, el responsable insular considera que «hay municipios de primera y de segunda, es decir unos que han hecho un trabajo de concienciación y otros que ahora comienzan», expone Ferrà.
«Al principio se generan problemas más propios de las personas de la segunda edad y de los jóvenes, a quienes hay que crear este hábito y darles incentivos. La gente mayor, en cambio, recupera el hábito, pues cuando eran niños ya devolvían las botellas a la tienda, y muchos residuos era la comida para los animales».
El Consell, según anuncia Josep Ferrà, llevará a cabo este año y el próximo campañas para impulsar la reducción de residuos e igualmente continuará incidiendo en la necesidad de reciclar y colaborar con los ayuntamientos.