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No hay solución a la vista en el Ajuntament de Palma. Las posturas de UM y Grosske siguen siendo irreconciliables y hacen inviable la continuidad del gobierno de Calvo en Palma. En las últimas horas, UM ha seguido pidiendo la dimisión de Grosske. Mientras, el dirigente de EU ha exigido la marcha de Nadal como concejal.

La posibilidad de un gobierno en minoría del PP en Cort es cada vez más factible y toda la atención política está puesta en los presupuestos municipales que deben aprobarse el día 22 de diciembre. Si todo sigue igual como ahora, Calvo no tiene garantizados los votos de todos sus socios para aprobar los presupuestos y, por lo tanto, la alcaldesa se vería obligada a dimitir.

En el grupo municipal de Unió Mallorquina se mantienen firmes y no tienen intención de seguir en un gobierno donde esté presente Grosske. De hecho, Cristina Cerdó podría ausentarse de nuevo de la junta de gobierno del Ajuntament de Palma que se celebra mañana miércoles. Los nacionalistas insisten en que Calvo deberá elegir entre UM o Grosske en el año y medio que falta para agotar la legislatura. En UM también se sienten humillados por Calvo, que llevó la propuesta de destitución de Cerdó y Oliver a la pasada ejecutiva del PSOE. Antich frenó la destitución de los dos ediles de UM por parte de la alcaldesa.

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Mientras, el portavoz del Bloc en el Ajuntament de Palma, Eberhard Grosske, dice ahora que la ruptura de relaciones con UM se limita al grupo municipal, pero que la relación con los nacionalistas debe seguir igual cuando estén en representación del equipo de gobierno de Aina Calvo. «La ruptura de relaciones con UM que aprobó Esquerra Unida (EU) es un gesto político que no tiene consecuencias en el marco institucional», aseveró.

En este sentido, el dirigente de Esquerra Unida explicó que «lo que se alteran son las relaciones políticas» entre las tres formaciones políticas que forman parte del equipo de gobierno hasta que el portavoz de UM, Miquel Nadal, entregue su acta de regidor. De este modo, Grosske aseguró que no se volverán a ver los procesos de negociación entre los tres grupos municipales, aunque insistió en que el equipo de gobierno puede seguir funcionando.

Por otra parte, Grosske aseguró que no se ha planteado dimitir, como le ha pedido UM. Además, señaló que está satisfecho con el 'código ético', ya que entiende que recoge las reivindicaciones de EU, aunque sea para futuros casos de corrupción política y no se aplique a los imputados que están en activo actualmente.

Por su parte, el coordinador de los Joves de EU en Balears, Xavi Galán, manifestó ayer que en función de cómo termine el «repacto» irán o no al pleno municipal del próximo 22 de diciembre, en el que se votarán los presupuestos. No obstante, el edil de Esquerra Unida puntualizó que si Nadal no entrega su acta de regidor o UM no se la pide volverán a manifestarse en el pleno en el que se deberían aprobar los presupuestos, poniendo en el aire las cuentas para 2010 y el pacto en Cort.