El nuevo centro escolar público, que cuenta con una superficies construida de 3.166 metros cuadrados, ofrecerá dos líneas de enseñanza en los ocho cursos que se impartirán en la escuela. La Conselleria d'Educació del Govern destinó casi tres millones de euros para construir el nuevo colegio que dispone de 6 aulas de infantil, dos de primaria, además de una aula de informática, un taller polivalente, una biblioteca, entre otros.
Desde el pasado 21 de diciembre profesores y miembros de las Associació de Pares i Mares d'Alumnes (Apima) han llevado a cabo el traslado de los materiales necesarios para que a partir del próximo lunes las clases puedan empezar con total normalidad. Algunos padres y madres lamentan que la brigada municipal del Ajuntament «no haya participado en las tareas debido a que los trabajadores del Consistorio estaban de vacaciones».
El alcalde del municipio, Jeroni Salom, asegura «sentirse muy satisfecho con el resultado de las obras» pero confiesa que «existen detalles que la Conselleria d'Educació y el Ajuntament han de pulir». En este sentido Salom destaca que el Consistorio mantiene trámites con Educació para que la institución se haga «responsable del mobiliario sobrante de Nostra Senyora de Robines, ya que éste es propiedad del Govern, y evitar así que el municipio corra con unos gastos que no le corresponden, como ya ha sucedido con los gastos de limpieza del fin de obras del nuevo centro».
El alcalde de Binissalem asevera que el Ajuntament propondrá que el nuevo centro escolar lleve el nombre del binissalemer Andreu Pol, último alcalde del municipio durante la república.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.