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El presidente afgano, Hamid Karzai, dijo el ayer que sus aliados occidentales apoyaban sus planes para reconciliarse con combatientes talibanes, mientras que los altos mando militares estadounidenses dijeron que los líderes de la insurgencia podrían incorporarse a las conversaciones y en un futuro integrarse en las tareas de gobierno.

Por ello, el líder afgano explicó que su gobierno podría pedir a la ONU que retire de la lista de grupos terroristas a los talibán más moderados con los que Kabul entablaría el diálogo.

Tanto el general Petraeus, jefe del comando central estadounidense, como el general Stanley McChrystal, comandante de las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en Afganistán, admitieron la posibilidad de eventuales conversaciones con el liderazgo talibán.

No obstante, también abogaron por una postura de fuerza y, en este sentido, Estados Unidos enviará otros 30.000 efectivos para acabar con el estancamiento por el que atraviesa el conflicto y debilitar a la disidencia.

Mientras Karzai trabajaba en un programa de reintegración formal de combatientes talibanes, que se espera que gane apoyo en una conferencia internacional que se realizará hen Londres, Estados Unidos ha dado su visto bueno para el presidente inicie contantos con los diferentes líderes talibanes.

Por su pate, el l secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, respaldó ayer la idea de reinsertar a insurgentes afganos, incluyendo a dirigentes de los taliban, siempre que acepten la Constitución y se comprometan a respetar los derechos humanos.