Así, en los siete primeros meses del año se han transferido en la región 38.772 vehículos de segunda mano, con un ascenso del 1,1 por ciento sobre el mismo periodo del año pasado. De ellos, 31.810 han sido turismos, que suben un 0,5 por ciento, y 6.962, furgonetas, que suben el 3,9 por ciento.
A nivel nacional, en julio se han vendido 169.314 vehículos de segunda mano, un 1,6 por ciento menos que en el mismo mes de 2022. De ellos, 145.810 han sido turismos, que caen un dos por ciento, y 23.504, furgonetas, que suben un 1,2 por ciento en el mes.
Por otro lado, en los siete primeros meses de 2023 las ventas de vehículos de ocasión han crecido un 2,7 por ciento con 1.277.536 transferidos. Así, del total, 1.093.529 han sido turismos, que incrementan un 2,4 por ciento las ventas en referencia al mismo periodo del pasado año, y 184.007, comerciales ligeros, con una subida del 4,6 por ciento. En julio se han vendido un total de 97.765 vehículos que superan los diez años de antigüedad, el 57,7 por ciento del mercado de julio. Del total, 84.839 han sido turismos, el 58,2 por ciento, y 12.926, furgonetas, un 55 por ciento.
En turismos, han crecido las unidades más nuevas, en concreto las de menos de un año han aumentado un 5,3 por ciento respecto al mismo mes del año pasado, y las de dos a tres años, un 34 por ciento. Igualmente, han aumentado un 10,7 por ciento los turismos de seis a diez años. De su lado, los eléctricos han agudizado su descenso, ya que en el mes de julio se han vendido 788 turismos, un 21 por ciento por debajo de julio del año anterior, y suman una bajada del 14 por ciento desde enero.
El diésel sigue siendo mayoritario en la segunda mano, con un 56 por ciento de las transferencias de turismos en julio, aunque un 5,6 por ciento menos que hace un año. Los turismos de gasolina han supuesto el 36,3 por ciento del mercado de ocasión del mes con una caída del 1,1 por ciento.
El presidente de Ancove, Eric Iglesias, ha señalado que «el mercado de segunda mano da muestras de cansancio y julio suma el tercer mes de caídas en lo que va de año, generando una gran preocupación entre los comerciantes de coches de segunda mano». En esta línea, ha asegurado que «a las dudas que los clientes muestran sobre qué tipo de turismo adquirir, se añade el encarecimiento derivado de las subidas del BCE». «De continuar así, el año podría terminar en negativo», ha concluido.
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Es que para comprarlo y aparcarlo en un atasco cada vez que quiero ir a algún sitio, que se queden el coche aparcado en el concesionario y yo con mi dinero y mi bicicleta.