Xialin Liu, una de las responsables del servicio, llamado Mallorcaren. | Bernat Garau

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En Mallorca viven actualmente unos 10.000 ciudadanos de origen chino. De ellos, aproximadamente la mitad entiende con dificultad el español y el catalán, y de los que son capaces de utilizar alguno de estos idiomas en el trabajo y en sus interacciones sociales muy pocos tienen el nivel suficiente como para leer el periódico o informarse a través de los medios de comunicación. Ante este panorama, la Asociación China de las Islas Baleares (Achinib) ofrece, entre su catálogo de recursos dirigidos a facilitar la vida diaria de este colectivo, un servicio de información de actualidad en su idioma. Lo hace a través de la app china WeChat, un híbrido entre WhatsApp e Instagram y otras redes sociales, incluyendo además un sistema de pago online y otras funcionalidades.

«Pusimos en marcha esta iniciativa al darnos cuenta de que muchos chinos residentes tenían serios problemas para enterarse de cosas importantes que les atañen directamente, como alertas meteorológicas, normativas que afectan a sus negocios, recursos y ayudas a las que pueden optar, cursos de español y catalán, cambios impositivos y legales,...», enumera Xialin Liu, una de las responsables de este servicio, que recibe el nombre de Mallorcaren y que sirve también a los usuarios para buscar empleo y personal, comprar y vender viviendas y ofrecer al resto de la comunidad china todo tipo de bienes y servicios. «Al mismo tiempo, de cara a su integración, creemos importante que conozcan la actualidad política, social y cultural del país en el que residen.

Esta herramienta cuenta actualmente con unos 10.000 inscritos.

Además, también informamos sobre fiestas, tradiciones y otros elementos de la cultura popular de Mallorca, e incluso redactamos guías para que entiendan las festividades y eventos sociales y sepan cómo disfrutar de ellos», explica Liu, quien incide en que «antes, en Sant Sebastià casi no veías chinos. Ahora, en parte gracias a Mallocaren, es más común encontrarte gente del colectivo», asegura. El servicio cuenta actualmente con unos 10.000 inscritos, la mayoría de la comunidad china de Mallorca, aunque también los hay residentes en las demás Islas o, incluso, en la Península. «Es una herramienta que cumple una importante labor social y ayuda a muchas personas a saber lo que pasa a su alrededor y conocer la cultura local. Algunos, de no ser por Mallorcaren, no se hubieran enterado tan fácilmente de que venía el temporal de finales de agosto», ejemplifica.