Así lo reveló ayer el presidente del Gobierno, José María Aznar,
en unas declaraciones efectuadas tras participar en el Congreso en
la recepción oficial con motivo del XXV aniversario de la
Constitución.
Según explicó Aznar, la información de que dispone el Ministerio
del Interior sobre los planes de los tres presuntos etarras apunta
a que «ese comando estaba dispuesto para actuar, iba a actuar
pronto y en España», probablemente en «muy pocos días».
Junto al supuesto dirigente de ETA Ibon Fernandez de Iradi,
alias «Susper», la Policía francesa capturó el jueves pasado a la
vascofrancesa Garazi Aldana y al español Patxi Abad.
Por otro lado, el grueso del «aparato militar» de la banda
terrorista ETA desmantelado este año lo formaban activistas
«legales» -no fichados por la Policía- con edades comprendidas
entre los 18 y 26 años. Además, fueron captados a partir del 2001,
para recabar durante meses datos sobre multitud de objetivos y
hacerles seguimientos hasta recibir la orden de atentar, según
informaron fuentes de la lucha antiterrorista.
Son casi medio centenar de hombres y mujeres con una medida de
edad de 26 años, y la porción más numerosa se sitúa en el tramo
comprendido entre los 20 y 25 años. Todos ellos formaban parte del
grupo de los 47 imputados por pertenencia o colaboración con ETA
que el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón envió a
prisión.
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