La estafa de los santeros, al descubierto.

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«Maestro seny curandero. Soluciona todos los problemas sentimentales, une parejas, novios y separados. Detiene divorcios, retira amantes. Atrae la pareja sin causar daño, potencia sentimientos y consigue que venga sumiso, obediente y fiel. Limpia las malas vibraciones y el mal de ojo, potencia la sexualidad...» Así se promociona publicitariamente uno de los muchos falsos curanderos de color que ejercen, de manera totalmente ilegal en la Isla.

Faltan unos minutos para que el reloj marque las doce del mediodía. Caminamos por el Passeig Mallorca de Palma y nos aborda un ciudadano. No habla nada de español, pero nos entrega un minúsculo papel en el que podemos leer multitud de virtudes que supuestamente practica un gran maestro santero. Tratamos de que nos explique algo más, pero logra escabullirse entre la multitud y nos emplaza a que leamos el folleto. Llamamos por teléfono. Nos atiende la llamada el gran maestro santero. «Que problema tener. Tú contar que yo puedo ayudarte en todo. La consulta es de 30 euros». Nos brinda un domicilio, sito en la barriada de Son Cotoner, muy próximo al viejo estadio Lluis Sitjar. Nuestro equipo comunica al Cuerpo Nacional de Policía nuestra intención de poner al descubierto una presunta estafa y establecemos una cita. Con la colaboración de la agencia de Detectives Record logramos introducir una cámara oculta en el domicilio.

Tocamos a la puerta. Nos abre un ciudadano de color que estaba chateando en un ordenador portátil. Nos hace entrar y...toca a la puerta de una de las habitaciones. Se oye una voz en un idioma que no logramos identificar. «Pasar, el maestro está dentro que os espera», dice uno de los moradoresdel piso. Cuando nos disponemos a entrar el gran maestro dice: «Quítate los zapatos y déjalos ahí fuera». Por unos instantes pensamos que también nos obligaría a dejar nuestras pertenencias -cámara oculta incluida-, pero afortunadamente no es así. Conseguimos introducir el dispositivo de captación de imágenes. Ya tenemos la prueba irrefutable de la pillería.

La habitación es pequeña. No tiene más de tres metros cuadrados. Está todo a oscuras y la única luz proviene de dos velas que acababan de ser encendidas. El gran santero es un hombre de color de unos 35 años aproximadamente. Viste con ropas africanas y un gorro en la cabeza. Su español es muy deficiente, pero lo suficiente para dejar claro que la consulta vale 30 euros y que se los teníamos que entregar. Nos coge la mano y marca nuestra silueta sobre un viejo cuaderno del Carrefour.

Le explicamos que tenemos problemas con nuestro jefe, nos inventamos un nombre y aquí empieza el cúmulo de despropósitos. Con unas plumas nos limpia el alma (o eso dice). Acto seguido cogió unos piezas de marfil y las tiró sobre la alfombra. «Lo veo claro. Tu problema es que tu hay un compañero que se interpone entre vosotros. ¿A qué si?», afirma el santero. Decidimos seguirle la corriente y, a pesar de que no daba una a todo le hacíamos creer que estaba acertando. Llega el momento crucial de la visita. «Si queréis que yo aparte cabeza a tu compañero malo y haga que tu jefe confíe en ti y te ponga arriba tengo que hacer un ritual con raíz de árbol. El precio es de 350 euros. 300 vale el material (la raíz del árbol) y 50 euros solo mi trabajo». Ya lo tenemos grabado y decidimos abandonar. El santero nos dice: «Dejar dinero a cuenta porque yo te puedo ayudar. Déjame algo y ves a buscar dinero», concluye. Aquí se acaba la historia. Le decimos que vamos a un cajero a sacar los 350 euros y nos marchamos. Acto seguido, recibimos más de cinco llamadas desde el móvil del santero para que fuésemos a llevarle el dinero. Por el momento, hemos sido víctimas de una presunta estafa de 30 euros.

Afortunadamente, con las imágenes que disponemos hemos podido comprobar 'in situ' con este documento de investigación periodística que el mundo de los rituales satánicos, curanderos, santeros y demás que se ofrecen en nuestras calles es una presunta farsa. Una manera de estafar a gente que lo está pasando mal y que busca una salida a su situación.

Un DVD con la copia íntegra de nuestra investigación ha sido facilitado al Cuerpo Nacional de Policía para que realicen las pesquisas que crean convenientes.