Los sanitarios atendieron al menor, que presentaba quemaduras de primer grado en la espalda. | Vasil Vasilev

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Sobre las cuatro y media de la tarde de ayer saltaron las primeras voces de alarma. Varias llamadas comunicaron a los equipos de emergencia que en el número 7 de la calle Rector Antoni Ferrer, en Palma, se había producido un importante incendio.
Rápidamente se desplazaron hasta el lugar del siniestro numerosas dotaciones de la Policía Local, Bombers de Palma, el VIR (Vehicle d'Intervenció Ràpida), técnicos del Seib-112 y una ambulancia medicalizada de SSG, Servicios Socio Sanitarios Generales. A su llegada, con suma celeridad consiguieron sofocar las llamas y controlar la situación.
Al parecer y, según las primeras hipótesis de la investigación, el fuego se inició en la cocina. Todo apunta que un hombre se encontraba con su hijo, de unos doce años de edad, estaba cocinando patatas fritas en una sartén, cuando de repente prendió en llamas el aceite alcanzando al menor.
El niño sufrió quemaduras de primer grado en la región alta de la espalda, concretamente en su hombre derecho y fue atendido in situ por el médico de la ambulancia que no consideró pertinente realizar el traslado a un centro hospitalario. La cocina y una habitación se vieron afectadas por el incendio. Tras unas horas, los propietarios pudieron regresar a su domicilio.