El Logitravel no reacciona

24 de 45 en tiros de dos puntos, 10 de 26 en triples y 8 de 13 en tiros libres. 22 rebotes (14 defensivos y 8 ofensivos) y 23 faltas personales.

PALENCIA (22+24+31+19): Raúl Mena (12), Michel Diouf (4), Carles Bravo (19), Adrian Moss (20), Jeff Xavier (12), -cinco inicial- Renan Leichtweiss (9), Juan Pedro García (3), Enric Garrido (5), Kyla Swanston (12) y Fernando Fernández (0). 22 de 41 en tiros de dos puntos, 12 de 21 en triples y 16 de 21 en tiros libres. 35 rebotes (24 defensivos y 11 ofensivos) y 15 faltas personales.

Árbitros: Pérez Bermejo y Jerez Vázquez. Eliminaron por cinco faltas personales a Marques Whippy y José Amador. Castigaron con técnica al entrenador local, Xavi Sastre.

El Logitravel Mallorca no levante cabeza. Los de Xavi Sastre sufieron el cuarto revés consecutivo, el segundo (86-96) en el Palau d'Esports, ante un Palencia que hizo su partido y se hizo fuerte desde la línea de 6'75 tras el descanso, además de apoyarse en algunas decisiones arbitrales puntuales y en la acumulación de faltas que padeció la escuadra isleña.

La reacción del Logitravel en la recta final del choque fue frenada en seco por la pareja arbitral, que castigó con técnica a Xavi Sastre cuando su equipo puso contra las cuerdas a los palentinos. El tropiezo ante los de Lezcano tiene doble valor de cara al average .

El Palencia salió enchufado a la contienda, pese a que el Logitravel se mostró firme desde el primer momento, apoyado en un regular Green y en la muñeca de Knutson. La batuta de Bivià y Alonso permitía que los castellanos no se fueran en el electrónico, aunque la acumulación de faltas empezaba a hacer mella con el paso de los minutos en el bando naranja, que al descanso llegaba con una ligera desventaja en el electrónico (42-46).

Las cosas cambiaron en el tercer cuarto, cuando el Palencia mostró su versión más acertada desde la línea de 6'75, con Bravo inspirado (4 de 5). Se fue el cuadro visitante, pese a que el Logitravel intentó no perder el hilo del encuentro. Algunas decisiones arbitrales y la inspiración del Palencia acabaron por dinamitar las ilusiones de un Mallorca que mereció algo más.