Toni Vicens y Alfons Alzamora luchan por un rebote durante el encuentro de ayer.

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La victoria del Palma Air Europa ante el Força Lleida (70-62) permite a los de Ángel Cepeda romper su mala racha de resultados, aunque el espesor de ideas exhibido ante un rival directo sembró la incertidumbre por momentos en el Palau.

Fue el Air Europa el que marcó el ritmo en los primeros compases. Múgica era la amenaza del Força Lleida de Alfons Alzamora, y un entonado Shawn Glover disparaba las expectativas (16-7, minuto 10).

Pero el Lleida tenía claro que no iba a dejar escapar la ocasión de sumar otra victoria lejos de Barris Nord. Mantenía el tipo el cuadro naranja, con Guerra omnipresente y el Palma acudiendo a Pantín para recuperar el mando al cierre de un tercer parcial (40-38) que les daba oxígeno.

El arranque del Air Europa en el capítulo final fue demoledor. Dos triples de Vicens y Glover abrían una brecha para la ilusión (46-38), pero Guerra y Kahlig seguían haciendo de las suyas, dándole la vuelta al electrónico camino del ecuador (49-52).

Entonces apareció oportuno Bertone para clavarla desde más allá de 6'75. Llorente asumió galones y Glover reactivó su muñeca para protagonizar el despegue definitivo del Air Europa hacia su tercera victoria. Un bálsamo y una lección para un Palma que supo sacar adelante una situación límite.